Este movimiento, surgido entre finales del siglo XIX y principios del siglo XX, entraña la ideología más allá de la arquitectura y la decoración. Sus maestros fundadores propusieron un retorno a la naturaleza, la calidad y la belleza como ideal de vida, en un momento en el que la industrialización se intensificaba.
Con esta celebración, Bruselas se reafirma como la capital internacional del Art Nouveau, ya que ha estado muy vinculada a esta corriente y hoy en día alberga casi mil edificios en su entramado de calles, sorprendiendo a todos sus visitantes.
Este año, Bruselas cuenta con dos importantes novedades. La primera de ellas es la reapertura como museo de la Casa Hannon, prevista para el día 1 de junio. Esta mansión fue construida por Jules Brunfaut para el ingeniero Edouard Hannon y ostenta una arquitectura, un mobiliario y una decoración excepcionales. Además de visitar sus salones, durante los próximos meses se podrá admirar en la primera planta una interesante exposición sobre las líneas belgas del Art Nouveau, con obras de Paul Hankar, Gustave Serrurier-Bovy y Henry van de Velde.
La segunda novedad es la inauguración del Centro de Interpretación del Art Nouveau en la Casa Van Eetvelde, una de las joyas arquitectónicas de Victor Horta, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Este lugar está concebido para ser un punto de información y para crear diálogo sobre la creación contemporánea, la investigación y el debate. Estará abierto varios días a la semana y acogerá numerosas actividades como conferencias, talleres… Asimismo, en la parte izquierda del edificio se podrán observar las mejores obras bruselenses de esta corriente, en una exposición que rememorará sus grandes momentos y su relación con la colonización.
Otro lugar de imprescindible visita es la Casa Tassel, la primera referencia de Art Nouveau en Bruselas, diseñada por Victor Horta y compuesta por una impresionante fachada moderna y suntuosos interiores con vitrales, mosaicos y hierro forjado.
Hay otras obras de Victor Horta que nadie puede perderse en su viaje a la capital belga: el Hôtel Solvay, una lujosa mansión que destaca por sus dos miradores simétricos que conforman la fachada y por un maravilloso interior en tonos rojos y naranjas; la Casa Autrique, con una puesta en escena imaginaria realizada por los guionistas y dibujantes Schuiten y Peeters; la Casa Max Hallet, que ofrece una perfecta sinfonía de colores, espirales y luces; y, entre otros, el Centro Belga del Cómic, un interesante centro de documentación moderna.
Victor Horta marcó tanto la historia de la arquitectura en Bruselas que este año se pretende ensalzar su trabajo a través de diferentes exposiciones, como Victor Horta y la gramática del Art Nouveau, en BOZAR, y Victor Horta versus el Art Nouveau. El vocabulario de Horta, en el Museo Horta, erigido sobre el domicilio particular y el taller del arquitecto, también de imprescindible visita.
Otros lugares muy recomendables son la Casa Cauchie, uno de los ejemplos más icónicos de esta corriente en la ciudad debido a su espectacular fachada, a su arquitectura y a su interior; y el MIM, el Museo de Instrumentos de Música, ubicado junto al Palacio Real.
El Año del Art Nouveau en Bruselas persigue el objetivo de valorizar el rico patrimonio en esta materia que alberga la ciudad, posicionándola como la capital mundial de este movimiento artístico.
Puedes consultar más información, así como la programación completa de actividades, en la página web de Visit Brussels:
https://bit.ly/40xVriK.