Los cuentos personalizados son historias en las que los personajes están diseñados al gusto de quien los encarga. La idea es crear esos personajes con las características físicas de la persona que va a recibir el cuento, eso se hace mediante un avatar que ofrece muchas opciones y también se pueden añadir fotografías.
Para encargar el cuento personalizado, el cliente tiene varias opciones de historias, debe elegir el avatar o avatares y, dependiendo del cuento que elija, puede añadir una o varias fotografías. La dedicatoria es una parte muy importante del cuento, es el lugar para expresar los sentimientos hacia el homenajeado y las razones por las que se decidió regalar el cuento.
Además, antes de que el cuento sea impreso, el cliente puede ver cómo va a lucir, mediante una versión digital en su dispositivo.
Otro aspecto importante es que los cuentos están disponibles en diferentes idiomas, se puede elegir el castellano, inglés, catalán, gallego, valenciano y también se tienen cuentos en euskera, lo cual cubre las opciones más buscadas por los españoles.
Los cuentos personalizados son muy beneficiosos, tanto para niños como para adultos. Algunos de estos beneficios son los siguientes:
Regalar un libro siempre es una excelente idea, ya que la lectura es una actividad de mucho provecho. Los cuentos son divertidos y además, aportan conocimiento, así que son buenos para cualquier edad.
Un cuento personalizado puede servir de herramienta para que los niños aprendan otros idiomas, practiquen la lectura, mejoren su ortografía y amplíen su vocabulario. Regalar un libro es una muy buena idea si el que lo va a recibir es un niño.
Los cuentos personalizados con fotos se convierten en objetos muy apreciados, ya que captan un momento de la vida y se constituyen en recuerdos invaluables.
Otra razón para elegir un cuento personalizado es que es un regalo muy original, fuera de lo común y que será inolvidable para quien lo recibe y quien lo regala.
Como hemos visto, los cuentos personalizados son una excelente opción para regalar o comprar para nuestros propios hijos.