“En el extremo opuesto encontramos a Barcelona, Madrid y Donostia-San Sebastián, tres capitales de provincia con alquileres medios por encima de los 1.400 euros mensuales, en las que las personas que dejasen de fumar por un lustro apenas podrían pagar cinco meses de renta”, detalla Font.
Esta tendencia también se mantiene en periodos de tiempo más cortos. Así, si un fumador dejara de gastar dinero en cigarrillos durante un año (1.679 euros de media), podría pagar más de 3 meses de alquiler en capitales como Jaén, Palencia o Zamora, mientras que en Barcelona no alcanzaría ni para un solo mes.
¿Cuántos años hay que dejar de fumar para pagar la entrada de un piso?
Dejando a un lado el mercado del alquiler, acabar con un hábito tan perjudicial como el tabaco puede destensar la economía familiar y acelerar el proceso de ahorro necesario para solicitar un préstamo hipotecario y pagar la entrada de un piso.
“Entendiendo la entrada de una vivienda como el 20% de su valor, observamos como en 20 capitales de provincia serían necesarios unos 15 años sin fumar para ahorrar la cantidad necesaria”, comenta el experto.
Frente a la realidad de esta gran cantidad de capitales, se encuentran zonas en las que habría que dejar de fumar hasta el doble de años para poder permitirse el pago de la entrada de un piso: Madrid (43,47 años), Barcelona (42,37 años) o Palma (39,54 años).