Mundo del Vino - Gastro

Restaurante Antojo, un tesoro a la vista en pleno centro de Barcelona

· Si alguno de nuestros lectores me pidiera que le recomendase un restaurante barcelonés en el que la necesidad diaria de comer se convierta en un auténtico deleite, mi primera opción sería Antojo

Edward Martín (Corresponsal en Barcelona) | Viernes 29 de septiembre de 2023
Es un lugar acogedor y cuya oferta culinaria transporta directamente al séptimo cielo. Se trata de un negocio familiar ubicado cerca de una de las zonas más transitadas de Barcelona capital (la calle Aragón) y que, gracias a sus propietarios, Juana y Antonio, y a los hijos de ambos, mantiene una línea de calidad que combina, mejor que bien, creatividad con tradición. Cada vez que tengo oportunidad de quedar con mi gran amigo Josep Lluís -que me lo dio a conocer- Antojo es el enclave culinario escogido para reunirnos. Les confieso que, como comensal debutante, me sorprendió la variedad y el buen criterio mostrado, tanto en la modalidad de menú diario como en la del especial de sábado.

Confieso que el día de mi debut tuve algunos problemas a la hora de escoger porque todo me resultaba sumamente apetecible. Fíjense en la colección de delicias que tuve a mi disposición para elegir, correspondiente al menú de 15,90€ (disponible de lunes a viernes) y que, para deleite de los paladares más estrictos, varía cada semana. Tomen buena nota de lo que contenía la oferta del día. Primeros platos: fetuccini casero de pimentón rojo de la Vera con chipirones y setas, Vichyssoise con picatostes y almendras, espárragos verdes a la plancha con romesco y ensalada de lentejas con pera, queso de oveja y vinagreta de mostaza. Segundos platos: suprema de bacalao con parmentier de patata y virutas de jamón y roast beef (carne asada) con reducción de Oporto y vacío de ternera gallega a la plancha. Postres: pastel casero de crema de almendras y pera, pastel de flan y helado de nata y chocolate.

Cuando aún me estaba recuperando de la muy positiva primera impresión, resulta que los sábados se ofrece, en exclusiva, un menú especial de 21€, que hace las delicias de los más exigentes. He aquí la lista completa de los tesoros de mesa y mantel que tuve delante de mí el primer sábado que acudí a Antojo. Primeros platos: arroz a la marinera, panaché de verduras con escamas de queso de oveja, milhojas con brandada de bacalao y crema de piquillos, tartar de vieiras sobre puré de guisantes a la menta. Segundos platos: suprema de merluza de palangre al horno con ensalada de lentejas, supremo de salmón ecológico a la plancha con verduritas asadas, carbonada flamenca a base de ternera rustida (asada) al estilo belga con cerveza Guinness, pies de cerdo ibérico confitados al cava y asados al horno. Postres: pastel de crema y limón, flan casero de almendras, yogurt griego casero con confitura y carpaccio de piña con helado de coco. ¿No es para levitar de placer?

Como ustedes podrán imaginar, la carta al completo está para chuparse los dedos y además ofrece la posibilidad de preparar comida para llevar (modalidad ‘take away’). Otro punto a favor de la diligente gestión del establecimiento, muy centrada en cuidar los detalles y, por supuesto, a la clientela. Hablando de detalles, he de mencionar que se pueden degustar bebidas al uso y que la carta de vinos, sin destacar por su amplitud, sí lo hace por su equilibrio, buen gusto y calidad. Caldos rosados, tintos o blancos complementan perfectamente la armonía de cualquiera de las opciones, ya sea la de menú diario o bien la especial de sábado. Como si se tratara de una partitura musical perfectamente arreglada, no hay una sola nota disonante o fuera de lugar. Todo está dispuesto para que los clientes disfruten haciendo honor a la palabra que da nombre al restaurante y disfruten del antojo o capricho que su apetito les sugiera.

Es digno de mención que la decoración del local destaca por su pulcritud y sobriedad. Las instalaciones están siempre relucientes y en “perfecto estado de revista”. Se respira sencillez, orden y una ausencia de bullicio que desaparece en cuanto el reloj marca las 14:00h. El restaurante se llena para dar cabida a profanos, transeúntes bien informados y leales seguidores que no disimulan el placer de comer mejor que bien y elevan el nivel del registro de decibelios. Quien, como un servidor sea particularmente suspicaz con el ruido de los locales debe tomar buena nota y reservar mesa (con suficiente antelación) y, preferiblemente, hacia las 13h.

En suma, Antojo es un paraíso culinario céntrico que hará las delicias de quienes prefieren la cocina mediterránea y española. La gente que normalmente lo frecuenta, suele repetir (doy fe) y recomendarlo, con acierto, como un local de referencia y absoluta confianza. Es muy fácil de localizar dada su estupenda ubicación. El personal es abnegado, atento y diligente. No se puede negar que un servicio prestado de un modo tan agradable es un valor añadido más que notable. Si pasan por Barcelona o bien residen en la misma Ciudad Condal, anoten bien el nombre de un restaurante que les va a sorprender gratamente por su oferta culinaria y su acogedora atmósfera. ¿Mi valoración final? Sin duda, 5 estrellas EMF.

DÓNDE ENCONTRARLO:

Restaurante Antojo

Calle Bailén, Nº 98, Barcelona

Teléfono: 934591726