En el reciente libro "El camino del desarrollo verde del Nuevo Uzbekistán" se recogen 310 citas y 54 iniciativas del Presidente uzbeko desde 2017 hasta 2025, relacionadas con la lucha contra el cambio climático, el uso racional de los recursos hídricos y naturales, la conservación de la biodiversidad y la transición hacia una economía verde.
El libro está dividido en tres capítulos:
El camino elegido por la humanidad
Frente a la crisis climática global, el agotamiento de los recursos naturales y el deterioro del medio ambiente, cada vez más países adoptan modelos de desarrollo sostenible. En este enfoque, la economía verde sustituye a los modelos industriales basados en la explotación de recursos y la negligencia de los riesgos ecológicos.
El líder de Uzbekistán ha subrayado en repetidas ocasiones que, para los países de Asia Central, el desarrollo verde debe ser la base de una nueva etapa de modernización:
“…Solo mediante un uso eficiente de los limitados recursos de tierra y agua, resolviendo los problemas ecológicos, y siguiendo el camino del desarrollo verde, de la economía verde y la energía verde, se puede garantizar el desarrollo sostenible del país y el bienestar de la población. Ese es el único camino correcto”.
Esta declaración refleja un cambio fundamental en la política del Estado: de un enfoque meramente económico a una visión estratégica centrada no solo en el crecimiento y la rentabilidad, sino también en la conservación del medio ambiente, la resiliencia de los ecosistemas y la salud de la población. Por ello, el Presidente insiste en que el rumbo verde no es una moda pasajera, sino una necesidad a largo plazo. El apoyo a las energías limpias, la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, el fortalecimiento de la legislación ecológica y la educación ambiental son parte de una reforma verde integral.
El Presidente destaca que la responsabilidad sobre el futuro no recae solo en los países desarrollados, sino también en las economías emergentes. En este contexto, afirmó en la Asamblea General de la ONU (2023):
“En este momento histórico decisivo, todos debemos reflexionar sobre el planeta que dejaremos a las futuras generaciones”.
Este llamado busca movilizar a la comunidad internacional, pero también refleja la transformación interna de Uzbekistán hacia la sostenibilidad, la eficiencia en el uso de recursos y la justicia climática.
Entre las propuestas científicamente fundamentadas del Presidente destacan:
Asia Central: rumbo a un futuro seguro
El cambio climático global es uno de los mayores retos de nuestro tiempo. Afecta a todos los países y se convierte en un obstáculo significativo para el desarrollo verde sostenible. El calentamiento global provoca fenómenos climáticos extremos en todo el mundo: sequías, huracanes, olas de calor, incendios, lluvias torrenciales e inundaciones.
Uzbekistán y otros países de Asia Central se encuentran entre los más vulnerables a las catástrofes ecológicas. Ante este panorama, la región busca respuestas propias a los desafíos del cambio climático y la degradación ambiental. Las iniciativas del Presidente de Uzbekistán en foros internacionales demuestran que la transformación verde es una prioridad compartida entre Estados.
En la 78ª sesión de la Asamblea General de la ONU (2023), el Presidente señaló:
“Hoy vivimos una grave crisis ecológica. Se intensifica la triple crisis planetaria provocada por el cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la contaminación ambiental. En estas condiciones, Asia Central, que sigue enfrentando la tragedia del mar de Aral, es una de las regiones más vulnerables al cambio climático”.
Esta afirmación destaca la necesidad de una integración regional en materia de seguridad ecológica y la importancia de actuar conjuntamente en la gestión de recursos naturales, especialmente los hídricos transfronterizos. El Presidente propuso una Estrategia Regional para combatir la desertificación y la degradación del suelo, señalando que la agricultura sostenible y la conservación de la biodiversidad solo son posibles mediante esfuerzos coordinados.
Entre las iniciativas clave de este enfoque regional se incluyen:
En los últimos años, a iniciativa de Uzbekistán, la Asamblea General de la ONU ha adoptado más de diez resoluciones especiales. Muchas de ellas abordan directamente cuestiones ecológicas en Asia Central y reflejan el papel activo de Uzbekistán en la diplomacia ambiental regional.
Todas estas iniciativas internacionales están arraigadas en los valores nacionales heredados de generaciones pasadas. Las propuestas ecológicas del Presidente uzbeko han recibido un amplio respaldo internacional y contribuyen de forma concreta al desarrollo sostenible global.
Uno de los logros más destacados fue la adopción en 2021 de una Resolución Especial de la Asamblea General de la ONU que declaró la región del Aral como zona de innovación y tecnologías ecológicas. Es la primera vez que la Asamblea concede un estatus tan alto a una región específica. Debido al retroceso del mar de Aral, esta zona se convirtió en un epicentro de catástrofe ecológica mundial, con alto riesgo para la salud humana y fragilidad del ecosistema.
La gestión de los recursos hídricos también está en el centro de atención del Presidente Shavkat Mirziyoyev. "La gestión eficiente del agua en cooperación con los países vecinos es la clave del desarrollo sostenible, no solo para Uzbekistán, sino para toda nuestra región", afirma el Presidente. Esta tesis es especialmente relevante para Asia Central, donde el agua se convierte en un recurso cada vez más escaso y políticamente sensible. El líder del país aboga por crear mecanismos sostenibles para la distribución y gestión conjunta de los flujos hídricos, lo cual debería reducir tensiones y garantizar un desarrollo armonioso.
En la cumbre de la OCS en Biskek (14 de junio de 2019), Shavkat Mirziyoyev propuso aprobar el Programa del "Cinturón Verde" de la OCS, con el objetivo de introducir tecnologías ecológicas y de ahorro de recursos en los países miembros. En la 14ª cumbre de la Organización de Cooperación Económica (OCE) (4 de marzo de 2021), el Presidente propuso desarrollar y aprobar una estrategia a mediano plazo para garantizar la sostenibilidad energética e impulsar la atracción de inversiones y tecnologías modernas en este ámbito.
Durante la tercera Reunión Consultiva de los Jefes de Estado de Asia Central (6 de agosto de 2021 en Turkmenistán), el Presidente de Uzbekistán propuso la elaboración de un programa regional titulado “Agenda Verde para Asia Central”, que contribuiría a la adaptación de los países de la región al cambio climático. Sus principales ejes podrían ser:
Frente al auge de la agenda climática internacional, la política ecológica sistemática que Uzbekistán está llevando a cabo en materia de protección del medio ambiente tiene como objetivo mejorar aún más la situación ecológica en Asia Central.
Formación de la conciencia y cultura ecológicas
Uzbekistán está integrando activamente los principios de la transformación verde en sus estrategias de desarrollo, estableciendo así una base para un crecimiento sostenible a largo plazo. Esta respuesta a los desafíos globales tiene como meta mejorar la calidad de vida de los ciudadanos, generar empleo y avanzar hacia el desarrollo verde sostenible del país. El desarrollo verde en Uzbekistán se ha convertido en un movimiento nacional. Su objetivo principal es dignificar la vida humana, mejorar el bienestar de la población y proteger los derechos fundamentales de los ciudadanos.
Para Uzbekistán, la transición al desarrollo verde no es un concepto abstracto o lejano: forma parte del rumbo constitucional del país, que abarca todos los sectores de la economía y la vida pública. El Presidente Shavkat Mirziyoyev destaca:
“Es fundamental avanzar hacia una economía basada en el uso cuidadoso de los recursos hídricos, energéticos y naturales. También es crucial desarrollar tecnologías verdes y digitales, así como instalaciones de producción modernas”.
No se trata solo de una reflexión teórica, sino de un principio rector de la política ambiental estatal. Bajo este lema se están desarrollando programas como:
Un ejemplo concreto es la construcción de centrales solares y eólicas en las regiones de Navoi, Bujará y Samarcanda. Estos proyectos, que cuentan con el respaldo de grandes inversores internacionales como Masdar y ACWA Power, generan empleo y reducen la dependencia de los recursos hidrocarburíferos.
El Presidente también subraya la importancia de formar una nueva mentalidad ecológica entre los jóvenes:
“Comprender la naturaleza, educar en lo ecológico y formar una conciencia y cultura medioambientales, especialmente entre los jóvenes, fomentando la bondad, la compasión y la solidaridad, son tareas esenciales para preservar nuestro entorno”.
En este contexto, se presta especial atención a la educación ambiental, la difusión de prácticas sostenibles, el apoyo a startups en tecnologías verdes y ecoinnovaciones. La creación de un índice nacional de eficiencia ecológica para regiones e instituciones sirve como herramienta para impulsar transformaciones sostenibles.
Uzbekistán se está convirtiendo en un ejemplo de enfoque sistémico hacia el desarrollo verde sostenible, combinando objetivos ecológicos con crecimiento económico y justicia social. Los principios de la economía verde se integran cada vez más en la planificación nacional, posicionando a Uzbekistán como un actor activo y motor de la agenda verde internacional.
Conclusiones: perspectivas futuras