Barbudo se presenta como un templo gastronómico que rinde homenaje a la cocina clásica desde una perspectiva moderna y sin artificios. Con una carta basada en productos de temporada y una ejecución impecable, la propuesta mezcla raíces tradicionales con guiños cosmopolitas que despiertan la memoria gustativa.
El restaurante se divide en dos espacios claramente diferenciados y con personalidad propia. En su primera planta, nos aguarda una animada barra que resulta perfecta para el tapeo contemporáneo. Aquí, se sirven pequeñas joyas culinarias como el brioche de steak tartar de picaña madurada o el bikini de rabo de toro con queso Comté, todo ello acompañado por una selección de más de veinte vinos por copa y una seductora carta de coctelería de autor.
La planta baja del restaurante nos adentra en un elegante y acogedor comedor, pensado para quienes buscan una experiencia más pausada. En este íntimo rincón, el chef José Carlos Fuentes despliega toda su creatividad con platos de fondo elaborados como la carrillera al estilo bourguignon cocinada durante seis horas o los tradicionales callos a la madrileña con un toque refinado que están a la altura de los paladares más sibaritas.
La experiencia en Barbudo comienza con detalles que marcan la diferencia como su imbatible aperitivo de ostras francesas y champagne Mumm Millésimé a un precio muy competitivo que busca democratizar la exclusividad en este encantador local donde sus bonitas paredes de papel pintado nos adentran en un irresistible recetario que toma forma en deliciosos bocados que van desde un sorprendente níspero con torta del Casar y anchoa, hasta una refrescante ensalada de confit de pato con vinagreta hoisin, porque en Barbudo cada plato ha sido diseñado para emocionar.
Entre sus elaboraciones más destacadas destacan el tarantelo de atún rojo a la brasa, los tagliatelle con morcillo y mayonesa de kimchi, o las magníficas verdinas con sepia y cebolleta japonesa que trasladan al comensal directamente al mar. Y como broche de oro, para rematar la velada no puede faltar el irresistible "pedacito de cielo". Una torrija con helado de caramelo y algodón de azúcar que promete robar más de una sonrisa.
Barbudo arranca su andadura en la capital fiel a su lema “Barriga feliz, alma feliz”. Una auténtica declaración de intenciones que deja claro que en Barbudo el disfrute y los buenos momentos están siempre garantizados.
¿Nos vemos pronto en Barbudo?
Barbudo
Dirección: Calle del Príncipe de Vergara 57
28006 Madrid
Teléfono: 614 28 10 71
Ticket Medio barra: 25€
Ticket Medio sala: 50€