Durante décadas, Miami ha sido sinónimo de playas infinitas, lujo y vida nocturna vibrante. Pero en los últimos años, la ciudad ha sumado un nuevo atributo a su carta de presentación: ser un destino comprometido con la sostenibilidad. Certificada con el LEED Gold for Cities, Miami Beach se encuentra entre las poco más de 110 ciudades del mundo que han alcanzado este reconocimiento por sus políticas ambientales y de planificación urbana. Iniciativas como la prohibición de fertilizantes en temporada de lluvias para proteger la bahía de Biscayne o las limpiezas de playas y manglares coordinadas por ONG como EcoMB son hoy parte del ADN local.
Entre los protagonistas de esta transformación me gustaría destacar dos hoteles icónicos bien conocidos, como:
The Palms Hotel & Spa
Inspirado en la naturaleza desde 2010, este hotel ha implementado su programa “Inspired by Nature” para reducir su huella ambiental y sensibilizar a huéspedes y comunidad. Certificado por Green Globe y Florida Green Lodging. The Palms alcanza un 84 % de los indicadores de sostenibilidad evaluados. Sus prácticas incluyen energía eficiente, eliminación de plásticos de un solo uso, puntos de recarga para coches eléctricos y jornadas de limpieza de playa. Además, apoya causas como Surfrider y la Coral Restoration Foundation.
Reconocido con premios regionales y nacionales: Green Globe, Sustainable South Florida, USA Today Reader’s Choice por eco-hotel, entre otros, que quedaría resumido en este documento, pero quizás más claro está en su web: “Nuestro compromiso con la sostenibilidad asegura que su estancia sea a la vez lujosa y amigable con nuestro entorno, permitiendo todo el confort de nuestro hotel a la vez que minimiza la huella ecológica”
1 Hotel South Beach
Considerado un referente de lujo sostenible, el 1 Hotel combina diseño elegante y funcionalidad con conciencia ecológica.
Hotel LEED Silver, diseñado con materiales reutilizados como maderas recuperadas, piedra coral local y mobiliario sostenible Equipado con paneles solares, filtración de agua en grifos, termostatos inteligentes, iluminación LED y tratamiento seguro de piscinas.
Promueve transporte sostenible: alquiler de bicicletas, vehículos eléctricos (Audi e-tron), y clases de mindfulness y bienestar.
Reconocido internacionalmente como un modelo de “lujo sostenible” desde su apertura en 2015 Condé Nast TravelerVanity Fair.
Ambos hoteles trabajan de la mano con el Greater Miami Convention & Visitors Bureau, que impulsa una agenda turística donde la sostenibilidad es parte esencial para la construcción de la experiencia.
A solo unos kilómetros de la ciudad, está el Parque Nacional Everglades, declarado Patrimonio de la Humanidad, Reserva de la Biosfera y Humedal de Importancia Internacional por la UNESCO, es el mayor ecosistema subtropical de los Estados Unidos. Se extiende por más de 6.000 km² al sur de Florida y alberga una extraordinaria biodiversidad, incluyendo especies emblemáticas como el manatí antillano, el alligator (similar al caimán) y la pantera de Florida, muchas de ellas en peligro de extinción.
Su importancia ecológica radica en que actúa como un gigantesco filtro natural de agua dulce, regula inundaciones y recarga los acuíferos que abastecen a millones de personas. Los manglares, humedales y praderas marinas que lo componen capturan carbono, protegen la costa de tormentas y son esenciales para la salud de la bahía de Florida y los arrecifes de coral cercanos.
En el plano turístico, los Everglades ofrecen experiencias únicas: recorridos en kayak o hidrodeslizador, o incluso más atrevido caminar por el bosque de cipreses inundado (recomendable hacerlo entre noviembre y abril para evitar los mosquitos que no perdonan), avistamiento de aves, senderos interpretativos y alojamientos sostenibles como el nuevo Flamingo Lodge proyecto público-privado.
Visitarlo implica descubrir un ecosistema único en el mundo y, al mismo tiempo, comprender la urgente necesidad de protegerlo frente a amenazas como el cambio climático y el desarrollo urbano. Miami es Everglades y hay que conocerlo
Miami también se está convirtiendo en un referente gastronómico sostenible. Restaurantes y hoteles apuestan por el concepto farm-to-table, priorizando el Km.0, con ingredientes frescos de granjas locales, pesca responsable y menús de temporada.
Desde un ceviche elaborado con pesca del día de las costas de Florida, hasta ensaladas con vegetales cultivados en huertos periurbanos, la propuesta culinaria es tan diversa como consciente, pero la verdad es una fusión que es más que recomendable. Y claro recomendaría algunos ejemplos testados como el restaurante AVIV (1 hotel Miami South Beach) del chef israelí Michael Solomonov y el restaurador Steve Cook, el de The Palm Hotel&Spa, La fusión peruana-japonesa de Suviche, el argentino Novecento (Key Biscayne), o el vegano del Love Life Café en WynWood y darse una vuelta camino a los Everglades por Robert Is Here Fruit Stand and Farm, entre otros.
Algunos establecimientos han incorporado programas de zero waste, compostaje y reducción de desperdicios, reforzando el vínculo entre placer culinario y responsabilidad ambiental, incluyendo al Greater Miami Visitor and Convention Bureau con un ejemplar programa de sostenibilidad y desperdicio cero en su restauración, exigido especialmente por una mayoria de sus clientes, pero además esta certificado como SILVER (Certificate for Sustainability & Social Impact ,2024) y FOUNDATIONS (Certificate for Sustainability & Social Impact ,2023)
El compost creado, que son grandes cantidades, con estos desperdicios orgánicos de su servicio de restauración se distribuye por las granjas cercanas cerrando la circularidad del sistema.
Restauración marina y arrecifes de coral
El proyecto The ReefLine busca restaurar una sección perdida del sistema arrecifal de Florida frente a Miami mediante arte, ciencia y tecnología, generando arrecifes artificiales que refuerzan la biodiversidad marina y la resiliencia costera. En los Florida Keys, la NOAA lidera un ambicioso plan para restaurar siete arrecifes emblemáticos mediante técnicas innovadoras de reimplantación de coral, protegiendo ecosistemas clave para el turismo de buceo.
En Monument Island, una iniciativa de limpieza marina mensual reúne voluntarios con kayaks gratuitos. En la primera experiencia, retiraron 60 kg de basura en solo tres horas, restaurando visual y ambientalmente un área turística.
Merece la pena echar una ojeada a la web de Visit Florida, donde se puede encontrar un resumen de las atracciones y actividades eco turísticas, y el Museo de Ciencia Phillip & Patricia Frost, que cuenta con un planetario, un acuario y seis pisos de exposiciones interactivas dedicadas al ecosistema de los Everglades.
Déjenme recomendar no olvidarse si le gustan los perros o gatos, visitar el refugio de la Humane Society of Greater Miami, donde los animales no tienen nunca un futuro de eutanasia y donde existe la posibilidad de que “cualquier” persona los pueda adoptar por horas o días mientras visita el destino y ofrecerles un tiempo de compañía fuera de su refugio.
Y para rematar como un ejemplo de evolución social urbana (sostenibilidad social) a través del arte callejero, no olviden visitar el barrio de Windwood, famoso por su espacio de grafiti y murales en las calles, que gracias al arte urbano paso de ser el barrio más marginal y peligroso al más moderno de Miami.
El camino al éxito de un destino turístico pasa necesariamente por la sostenibilidad e innovación y Miami lo está demostrando.