No obstante, hubo de ser intervenido en dos ocasiones tras ello, dando como resultado una Artrodesis y una Algodistrofia, secuelas que afectan a la funcionalidad y movilidad de su pulgar. Esta negligencia médica le llevó a permanecer un total de 873 días en situación de baja médica y lo que ha afectado gravemente a su oficio de diseñador gráfico.
Explican sus abogadas, las abogadas Alexandra Zulaika Grau, especialista en derecho civil y Jana Zulaika Grau, especialista en derecho administrativo del despacho Grau Advocats, que, entre el daño sufrido por el paciente y el funcionamiento del Servei Català de la Salut hay una clara relación de causalidad.
“No se practicó exploración cuidadosa, ni se derivó al paciente al servicio de traumatología o a urgencias del hospital más próximo, ni tampoco se realizó una prueba por imagen pese a la localización de la herida y pese a que el recurrente no podía mover el dedo. Eso hubiera permitido ver la rotura del tendón del pulgar, que no se trató en ese momento”, explica su representación legal.
Por todo esto, la jueza titular del Juzgado de lo Contencioso Administrativo nº4 de Barcelona, en su sentencia nº 283/2025, ha estimado la demanda interpuesta y ha condenado a la Sanidad Catalana a indemnizar al paciente con la cantidad de 67.146,76€ más las costas del procedimiento.
“Ha costado mucho llegar a esta sentencia, pues anteriormente ya se interpuso la correspondiente reclamación legal administrativa ante el Servei Català de la Salud, quién negó cualquier responsabilidad”, cuentan.
Hay que destacar también el gran trabajo de los dos peritos médicos que han ayudado a conseguir este resultado, un perfil profesional clave en este tipo de reclamaciones ya que son los encargados de la elaboración de los peritajes médicos para, en este caso, la defensa.