¿ES INTERNET EL MEJOR MODELO DE NEGOCIO?
· Por Jaoquín Cañas, corresponsal en Taiwán (艾華國)
Joaquín Cañas (Corresponsal en Taiwán) | Sábado 19 de diciembre de 2015
Después de casi 10 horas de espectáculo, emoción, sorpresas y lecciones sobre dinero, economía y estilos de vida, finalizaba '2015 X-WEALTH' en Taipei, uno de los cientos de espectáculos que 'Success Resources Global' organiza cada año y hace posible que individuos, empresas y organizaciones puedan darse a conocer por el mundo entero. En esta ocasión, el pasado jueves, se congregaron varios millonarios y multimillonarios de reconocido prestigio mundial, capitaneados por el archiconocido hombre de negocios, inversor y orador Robert Kiyosaki. El tópico del seminario: la riqueza. El encuentro, y doy fe de ello porque allí me encontraba, no dejó a ninguno entre el público insatisfecho. El autor de “Padre Rico Padre Pobre” (Rich Dad Poor Dad, 2000), el libro de finanzas número uno de todos los tiempos, comenzaba su lección magistral con una pregunta sencilla: ¿Cuándo voy a aprender sobre dinero? De hecho, es lo que Robert –nos decía- siempre se había preguntado una y otra vez desde pequeño, en el colegio. “Bien, mi trabajo hoy es ofreceros una imagen más grande sobre el dinero y el mundo de los negocios”. Pero antes de llegar a Robert, veamos rápidamente quiénes son algunos de esos otros millonarios presentes en la cita.
Uno de los primeros fue Peng Joon, un reconocido joven malayo –ronda los 30 años- que ha sido capaz de hacer enormes cantidades de dinero en los últimos siete años a través de internet. Recuerden su nombre porque a pesar de su juventud ya se ha codeado con algunos de los grandes expertos en riqueza y oratoria del momento, como son Sir Richard Brandson, Tony Robbins, JT Foox, Donald Trump, Kevin Green o el mismísimo Robert Kiyosaki. Peng Joon fue sincero en su discurso, y muy práctico, por eso me gustó tanto: habiendo conseguido una beca del gobierno malayo para estudiar carrera en Inglaterra, resultó ser poco amigo de los estudios y al tercer año perdiendo la beca regresó a su país con las manos vacías y una gran deuda. Después de dos años trabajando y cobrando un sueldo ridículo (1.200 Ringgit, unos 270 euros), abrumado aún por la deuda, buscó y encontró en internet una nueva forma de solucionar sus problemas.
Con bastante detalle, laptop en mano y una conexión a internet Peng nos explicaba por qué internet es el mejor modelo de negocios y cómo te permite hacer dinero de forma pasiva. Por eso quiso compartir algunas de sus mejores estrategias, como la automatización (el tener un sistema de trabajo serio, ordenado y preciso); el marketing: “El marketing lo es todo, es algo que se aprende y se entrena, es baratísimo y puede dar unos beneficios grandísimos. Puedes hacer que el negocio trabaje para ti aún cuando estás durmiendo”; o la promoción de productos: “Puedes comprar y vender online productos de muy diversa índole, por ejemplo lecciones de piano en video, pagas al músico experto y pones un precio para compartir el contenido fragmentado online”. Además, Peng habló también sobre su programa online 'Internet Income Intensive', y lo sencillo que resulta crear una web y empezar a hacer dinero.
Sin duda, la aportación más atómica del día, más efusiva, fue la del millonario JT Foxx, un genio del márketing y el brandind (marca). Impresionante puesta en escena, en menos de un minuto ya había captado la atención de las más de 1500 personas que allí nos congregábamos. Transmitió, sin embargo, una aparente visión materialista sobre el dinero y los negocios, a pesar de mostrarnos algunas de sus supuestas actividades filantrópicas por el mundo. Su estilo y personalidad manifestaron parte de su ego: “Soy el mejor entrenador de riqueza del mundo, el único orador en el mundo con alumnos taiwaneses entre mis top ten alumnos, si no tienes negocio no te preocupes que yo te voy a buscar uno. El reloj que llevo vale 1 millón de dólares americanos. Yo cambio personas, cambio países y paso más tiempo en el aire (volando) que en la tierra”.
Pero lo uno no quita lo otro, desde el punto de vista del marketing, de la comunicación o del branding, no hay dudas, es un genio, es el que mejor se vende y el que mejor sabe vender. En esto ayuda mucho, claro, la personalidad y la puesta en escena. Por eso Foxx se deleitaba al explicarnos que es propietario de 59 empresas y que su pasión es hacer a otros ricos. “No te voy a dejar caer, voy a hacerte rico” -gritaba una y otra vez al público- promesas que al final de su intervención volvieron locos a muchos taiwaneses, que corrían a rellenar formularios, a pagar y a esperar el milagro que Foxx les prometía. Foxx, haciendo a otros ricos y se hace más rico, obviamente.
Otro de los grandes fue Sean Seah, de Singapur, ¿le conocen? Pues es el que algunos consideran el sucesor de Warren Buffet, de hecho es en realidad su discípulo. Su discurso se enfocó en el mercado de acciones, la libertad financiera (ese passive income del que nos hablaba también Peng Joon) y compartió con la audiencia algunas de sus estrategias -muy en la línea de Buffet-: tener mucho cashflow (flujo de caja) en tu cuenta bancaria, elegir compañías que se han mantenido históricamente estables en el mercado de acciones, comprar acciones en el momento apropiado (algo que en realidad ya más o menos todos sabemos: cuando tienen muy poco valor en el mercado), etc.
Por su parte Kevin Green, el británico de oro experto en inversión de inmuebles, que incluso el gobierno busca para pedir consejo, se presentó en escena muy seguro, equilibrado y tranquilo. “Ordeñando vacas de pequeño comprendí que eso no era lo que quería hacer el resto de mi vida. Tenía un maestro que me desaconsejaba el camino del éxito y el dinero, me decía que nunca sería rico, cuando finalmente lo fui y me reencontré con él le agradecí su consejo: había convertido su negatividad en una oportunidad para demostrar que estaba equivocado”. A lo largo de su charla, salteada con bromas, compartió con el público algunas de las claves del éxito, como son la educación continua y la autoestima; así como 3 sencillas formas de éxito: la pasión, la diversión y el beneficio. “Mi estrategia es comprar siempre a mitad de precio, así que espero al momento oportuno y compro. De cada 3 propiedades, una la vendo. Pago mis deudas en el décimo año”.
Robert Kiyosaki fue el plato fuerte de la noche, un hombre respetado y bien experimentado en negocios e inversión, capaz de predecir el colapso financiero de 2007 y augurando desde 2002 (con su libro “Profecía del Padre Rico”) otra quiebra del sistema financiero mundial a suceder dentro de los dos próximos años. “La escuela tradicional te enseña dos cosas equivocadas: te dice que no cometas errores y que no ayudes a tus compañeros. Pero yo digo, comete errores. Yo he cometido muchos, y gracias a ellos he aprendido”. A parte, Robert dio una tremenda importancia al trabajo en equipo: “En el mundo de los negocios no gana el más listo, gana el que mejor sabe vender y el que tiene mejor equipo. Si yo soy rico es porque tengo un gran equipo, ese es mi mejor “asset” (bien): cuando invierto no lo hago individualmente, tengo muy buenos abogados, banqueros (puedo conseguir un préstamo de 10 millones de dólares con una llamada) y lo más importante, tengo a mi mujer, que es muy valiente e inteligente. Ambos compartimos pasión por los negocios y empezamos desde el principio juntos”. La educación también fue uno de sus grandes aportes: “Mi mujer y yo somos ricos porque nos educamos”.
El último experto de la noche, el más moderado a mi juicio, es precisamente uno de los grandes expertos en economía de nuestros días, Richard Duncan. Miembro del equipo de Kiyosaki, Richard fue muy duro y directo con las previsiones económicas mundiales. Nos explicó cómo el “oro” siempre había dirigido la economía mundial hasta los años 90, cuando internet y la revolución tecnológica cambiaron el panorama radicalmente: “EE.UU contribuyó al crecimiento de multitud de países asiáticos en los últimos 40 años, pero ya en 2007 había acumulado demasiada deuda y ahora es sencillamente enorme. En China la economía está en recesión y no mejorará en el corto plazo. La diferencia entre ricos y pobres se dispara, deberíamos dar gracias si en los próximos años sigue creciendo la economía a un 3%. Las cosas no van a ir bien, porque miles de familias se han endeudado con préstamos que no pueden devolver. Hay algo seguro y es que después de un “boom” viene un “bust” (quiebra). Ya pasó en América, o en Japón en los 90”.
Después de tan prolongada sesión, entre algunos de los mejores y mayores expertos en riqueza del mundo, personalmente me quedo con ese momento en el que Robert Kiyosaki metió la mano en el bolsillo, sacó su móvil y dijo seriamente: “Esta es la herramienta más poderosa del mundo hoy, hago más dinero a través de internet en mi móvil, que en la oficina”.
Cada uno que saque sus conclusiones.