Ellos aportan el "toque cómico", añade Solovieva, en un espectáculo que contará en las siguientes fechas con los integrantes de la Escuela de Ballet Ruso Nazarenco, la Escuela de Ballet Carmen Ocaña y Pablo Savoye de Madrid y el Centro de Danza María Larios de Coslada (Madrid).
'El Cascanueces' se desarrolla en una casa alemana a principios del siglo XIX, escenario de una fiesta de Nochebuena a la que, entre los invitados, llega el inventor Drosselmayer, que trae a la pequeña Clara varios regalos, entre ellos un Cascanueces.
El juguete cobra vida en los sueños de la joven, en los que junto a un ejército de soldados de plomo se enfrenta al rey de los ratones y sus roedores, en una batalla tras la cual se convierte en un príncipe que acompaña a Clara a un mundo mágico.
Junto al trabajo como solistas Nariman Bekzhanov y Lina Sheveleva, la productora destaca la coreografía de los copos de nieve como "la más difícil y bonita para ver", en la que los bailarines "aparecen y desaparecen continuamente, volando en un movimiento constante".
Con el objetivo de llevar "la cultura con mayúsculas" a los nuevos públicos, en este ballet se crea "una atmósfera que une a artistas y espectadores" con la música del compositor ruso, manifiesta Solovieva.
'El Cascanueces' estará hasta el 9 de enero en el Teatro Lope de Vega, pero no será la única obra del Ballet Imperial Ruso en la Gran Vía madrileña, donde a partir de mañana ofrecerá también "El lago de los cisnes" en el Teatro de la Luz Philips.
- Ballet en 2 actos
- Música: Piotr Chaikovsky
- Coreografía: Gediminas Taranda
- Diseño del decorado y vestuario: Andrey Zlobin, Anna Epatieva