El responsable del BE destacó que "a medio plazo cabe esperar que se produzca una convergencia gradual hacia tasas de crecimiento más moderadas, por la desaparición de las caídas de los precios del petróleo, la moderación de los costes de financiación, el tono expansivo de la política fiscal durante 2015 y 2016 o la elevada volatilidad de los precios".
De igual forma, señaló que la prolongación de la actual fase de crecimiento de la economía española durante los próximos trimestres se apoyará en el "fuerte ritmo de expansión de la demanda nacional", y en particular, el "dinamismo del empleo". Además las favorables condiciones de acceso al crédito "están impulsando el consumo de los hogares y la recuperación del gasto en inversión residencial", agregó.
En cuanto a los "riesgos" que pueden afectar a la economía española el gobernador citó el endeudamiento en niveles "elevados", el "Brexit" (salida de Reino Unido de la Unión Europea) que va a tener un costo "indudable para España", además de la tasa de paro, el envejecimiento de la población y la "baja" productividad, que limitan el crecimiento.
En relación al objetivo de déficit fijado en 3,1 por ciento para este año, Linde aseguró que es un "objetivo alcanzable", aunque precisó que la previsión de recaudación del gobierno para este año plantea "alguna incertidumbre".