El hallazgo del segundo estudio, realizado por investigadores de la Universidad del Sur de California, es importante porque las distintas razas tienen estilos de vida y riesgos de enfermedades diferentes. "Recomendar la ingesta de café para reducir la mortalidad o evitar enfermedades crónicas sería prematuro", publicó la revista en un editorial.
"Sin embargo, es cada vez más evidente que una ingesta moderada de café de entre tres y cinco tazas diarias o el consumo de 400 miligramos diarios de cafeína no está asociada con efectos adversos para la salud en adultos y puede incorporarse en una dieta saludable", añadió. En el primer estudio, investigadores de la Agencia Internacional de Investigación sobre el Cáncer y del Imperial College de Londres utilizaron datos del Estudio Prospectivo Europeo sobre Nutrición y Cáncer para comparar todas las causas y las causas específicas de mortalidad de personas que bebían café y aquellas que no.
En el segundo estudio, investigadores de la Universidad del Sur de California buscaron determinar cómo afecta el consumo del café a la salud de personas de múltiples razas utilizando datos del Cohorte Multiétnico, un seguimiento de 16 años de más de 185.000 afroestadounidenses, nativo americanos, hawaianos, latinos, asiático-estadounidenses y blancos.
De acuerdo con el editorial, el efecto protector del café es biológicamente plausible porque los polifenoles y otros bioactivos en él tienen propiedades antioxidantes vinculadas con la reducción de la resistencia a la insulina, la inflamación y los biomarcadores de las funciones hepáticas.
El café es una de las bebidas más normalmente consumidas en todo el mundo, con la ingesta de unas 2.250 millones de tazas diarias a nivel mundial. Debido a su consumo ubicuo, entender los efectos del café en la salud es importante.