La colección encuentra su mejor escenario en los Cines del Palacio de la Prensa de Madrid, ya que el cine inspira el tratamiento de color, un rasgo cromático que la marca adopta de aquí en adelante, y con el que Chromosome afianza su identidad. La paleta de color se forma a partir del trinomio RGB, al que se unen tonalidades blancas, negras, grises beiges.
Destacan piezas de sastrería clásica que Chromosome ha intervenido a través de elementos propios del trabajo, como la camisa con cuello de médico del siglo XV y abotonadura de alfiletero de sastre; las chaquetas con joroba de moto; el vestido guante de trabajo; el vestido bolso; o el traje sastre con escayola en chaqueta y pantalón.
Chromosome introduce elementos del motor como la goma de ventanilla de coche y airbags en su traje de novia, y crea un vestido corbata de una pieza para el novio. En Esta línea destacan los trajes de motorista que recrean piel humana en el exterior a través de rozaduras en los codos y marcas del sol.
Como cada temporada, Chromosome crea piezas de calzado ad hoc para cada look: destacan las botas con lencería, o los zapatos de tacón oversize. La colección tiene como tejidos protagonistas la licra, el popelín, la polipiel, el acero inoxidable, la goma, el poliestireno, o un tejido que recrea la escayola. Chromosome huye de los tejidos de lujo, creando un nuevo lujo a partir de tejidos y materiales que tradicionalmente no se utilizan de este modo. En la confección se ha empleado tanto métodos industriales como el láser, como procesos manuales como el trabajo sobre el poliestireno. Se han utilizado elementos como imanes, cables de cobre, o moldes de silicona.
La colección se presenta en una proyección en el propio cine antes de dar comienzo al desfile, de esta forma espectador presencia el desfile tanto en vivo, como en formato audiovisual minutos antes.