“Estamos viviendo una lucha entre 3 modelos distintos de sociedad: la democracia, las empresas globales y los estados. Esas tres placas tectónicas producen muchos terremotos”.
Juan Pedro Moreno se ha referido a las grandes tecnológicas como “las grandes empresas de la experiencia”, para precisar que “está cambiando la manera de hacer negocios” y que triunfan las entidades que “se ganan la confianza del consumidor”: “¿Por qué se hace cola para pagar más de 1.000 euros por un teléfono? Por la experiencia”, ha dicho.
En su análisis sobre la evolución global de los hábitos de consumo, Juan Pedro Moreno, ha señalado que la transformación que estamos viviendo “no se debe a la irrupción de nuevas tecnologías”, ya existentes en los años 50 y 60, sino a que son mucho más asequibles porque hay una “aceleración brutal en la bajada de los costes” y, sobre todo, a la “llegada de la economía de la experiencia”, que sitúa a la persona, al consumidor, al cliente o al paciente en el centro, tras la toma de decisión de los ciudadanos teniendo en cuenta, por encima del coste del producto, “la experiencia que le reporta su consumo”, en empresas como Amazon que ofrecen una “experiencia diferencial”, porque se puede comprar con un clic y devolver el producto sin problemas.
El tercer factor de transformación de nuestra sociedad es, en su opinión, el aumento de la expectativa de vida, una magnífica noticia que plantea retos importantes en la forma de operar, teniendo en cuenta que “en 2050, un 32% de la población mundial tendrá más de 65 años y España, junto a Japón, será el país más viejo del planeta”. Para el presidente de Accenture, la sociedad tiene que transformarse e ir hacia la silvereconomy o ‘sociedad de las canas’, como consecuencia de que vamos a tener más jubilados y viviremos una media de cien años. “Será muy difícil avanzar para los milenials”, ha advertido, “vamos a vivir en sociedad en la que hasta cuatro generaciones tendrán que vivir y trabajar juntos”, una nueva realidad que requiere cambios y que será complicada de gestionar.
La relación entre las personas y nuestra relación con la tecnología marcan todas las tendencias en un mundo que registra “la nueva revolución de la voz”, ha indicado para decir que en 2019 se vendieron en Estados Unidos 50 millones de Alexa, “una herramienta para manejar la tecnologías con un teclado desde el hogar y el coche”.
El máximo responsable de Accenture considera que estamos entrando de lleno en la robotización de los procesos porque se exige mayor eficiencia, un factor que permite competir a empresas pequeñas que acaban de nacer con las que llevan años, en terrenos como el marketing digital o la ciberseguridad.
En cuanto al mercado de trabajo, Moreno ha dicho que está impactado por tres elementos: la oferta, la demanda y la educación, que marca la diferencia y va a ser clave. Tras subrayar que “no se trata de que haya mucho trabajo sino de que se remunere adecuadamente”, Juan Pedro Moreno ha manifestado en Foro Next que “la digitalización permite reducir el número de personas en una unidad de trabajo, pero no tiene que ver con la desaparición del ser humano”.
Además, ha advertido que si no cambiamos el modelo de sociedad no vamos a tener trabajadores disponibles, porque la oferta de los que se incorporen en los próximos diez años va a caer un 7% cada año, mientras la demanda solo bajará como máximo un 1,7% .“La educación es la clave, va a determinar cuánta gente va a trabajar en España y cuánto va a ganar; lo que destruye empleo no es la robótica, es la falta de formación y educación”.
En ese sentido, Moreno ha señalado que “esta revolución que estamos viviendo exige muchos menos licenciados superiores. La belleza de lo que estamos haciendo es que esto permite ser inclusivo. Yo creo en un trabajador aumentado, con capacidades medias se puede convertir en un ‘súpertrabajador’ si puede interactuar con un robot. Que te formen en Big data, realidad aumentada, impresoras 3D… Y eso se enseña en las escuelas de FP”.
El presidente de Accenture también ha hecho hincapié en la importancia de la formación en la rama de Humanidades, al considerar que “la tecnología nos ha deshumanizado”. En relación a ello, considera que “si manejas gran cantidad de datos y necesitas interpretarlos en términos de comportamiento humano, cada vez en más necesaria la demanda de profesionales formados en este sector.