La reunión de la Fed en su conjunto no decepcionó las expectativas de precaución señaladas por los bonos del Tesoro en las últimas semanas, al lanzar un nuevo mensaje de paciencia sobre la agenda del tapering. Si bien el comunicado de prensa cambió el lenguaje sobre la recuperación de la economía hasta el momento, las señales de optimismo cedieron con la posterior rueda de prensa del presidente Jerome Powell. El director del banco central afirmó que el progreso hacia las condiciones de normalización de la política monetaria no significa que el tapering se anuncie de manera inminente, ya que se necesita mejores resultados visibles en el mercado laboral antes de que se tome esa decisión. El tono moderado se repitió a lo largo de la conferencia de prensa y socavó el repunte inicial del dólar. Al final de la sesión de negociación, el índice DXY del dólar había caído un 0,15% en el día. Esta mañana, el dólar se ha coloacado a la defensiva frente al G10 frente a la lectura preliminar del PIB del segundo trimestre a las 14:30 CET. Se espera que los datos de crecimiento para el segundo trimestre se impriman cerca de niveles récord, en un 8,5% anualizado, gracias al avance de las vacunaciones, las medidas de estímulo fiscal y la reapertura amplia de la economía durante el período.
La libra se ha recuperado a máximos de un mes frente al dólar esta mañana y opera en sus mejores niveles frente al euro desde inicios de abril. El impulso de la moneda británica fue parcialmente respaldado por la caída general del dólar tras la presentación de la Reserva Federal anoche, reflejándose con mejores bríos en el NZD, CAD, NOK y GBP dentro de la cesta del G10. El sentimiento de riesgo ha dado un giro favorable esta mañana, tras conocerse que el regulador chino se reunió anoche con los principales bancos de inversión para tratar de aliviar la volatilidad del mercado de valores tras el endurecimiento de las regulaciones en ciertos sectores. Mientras tanto, el país respira alivio tras la mejora de la dinámica de contagios por la variante delta, pese que aún se mantiene la señal de precaución en espacios públicos. El gobierno confirmó que, a partir de la próxima semana, los viajeros europeos y norteamericanos vacunados podrán entrar al país sin requisito de cuarentena, lo que se añade al guión de desescalada de restricciones en el Reino Unido.
El peso mexicano recobró ímpetu en la jornada de ayer, avanzando por séptima jornada consecutiva frente al dólar y colocándose en firme sobre una resistencia relevante. La presentación de la Fed fue el principal catalizador del movimiento, aliviando la presión de las espaldas de Banxico sobre posibles ajustes monetarios. Sin embargo, una postura más laxa de la Fed no elimina por completo el riesgo alcista de los tipos de interés mexicanos. Con la inflación norteamericana en niveles elevados al tiempo que la Fed bombea amplios estímulos, los riesgos de traspaso a la inflación doméstica son elevados pese a un peso relativamente fuerte. La subida de tipos podría entregarle atractivo a la moneda desde una perspectiva de carry trade, pero una senda agresiva de ajustes podría estrangular el dinamismo de la recuperación económica mexicana al mismo tiempo. Los inversores esperan ahora al cierre de la semana para conocer el avance del PIB azteca en el segundo trimestre del año.