Cultura: el Jardín de Atenea

Museo Chicote rinde homenaje a Frank Sinatra en el 25º aniversario de su muerte

Frank, Ava Gardner y Perico Chicote

FRANK SINATRA A SU MANERA 25 AÑOS SIN LA VOZ

Uno de los locales que más visitó La Voz fue Museo Chicote junto con su mujer Ava Gardner en sus visitas a Madrid

Redacción | Jueves 25 de mayo de 2023

El Museo Chicote (Gran Vía, 12) rinde homenaje a uno de sus clientes más internacionales y famosos: La Voz. Tenía 82 años cuando Frank Sinatra nos dejó y una trayectoria como actor y cantante, que un cuarto de siglo después sigue más que vigente. Y una voz peculiar, llena de matices, una manera de cantar única que unida a su encanto personal le convirtió en un ídolo. Con ese carisma especial como todas las estrellas de Hollywood, Frank aterrizó en Madrid y en el Museo Chicote en los años 50 con el amor de su vida: Ava Gardner.



Ava, amiga íntima de Perico Chicote, fue quien hizo de maestra de ceremonias llevando a Frank a conocer el mítico Museo Chicote y presentando a Frank a su propietario Perico Chicote.

En el local de la Gran Vía las apariencias y el glamour se difuminan para generar noches de libertad y desenfreno donde Frank Sinatra dejó su huella personal con noches locas para el recuerdo, y es que durante décadas fue el bar oficial de las estrellas del Hollywood dorado y de las celebridades.

Frank siempre tomaba su néctar de Dioses con la dosis justa, como la receta que tienen desde 1931 en Museo Chicote y que ejecuta perfectamente el Bartender de la coctelería Nacho Zamora: tres hielos, dos dedos de Jack y un toque de agua. Tan sencillo y tan extraordinario, así que si quieres escuchar a La Voz y beber la copa de dioses de Frank en un ambiente de glamour hollywoodiense, el Museo Chicote es tu lugar.

HISTORIA ¨VIVA¨ DE LA GRAN VÍA

Chicote, fundó este local en 1931 e introdujo el cóctel en España convirtiendo su bar en la mejor embajada del país durante décadas. Desde su inauguración ha llenado muchas páginas de historias y anécdotas. Hoy sigue siendo sinónimo de diversión.

En el local se firmaban contratos de cine, se hacían recepciones, degustaciones…“Ni era, ni es un museo de botellas, sino de personalidades”.(Perico Chicote dixit)