Ocho años después del comienzo de la crisis económica, el año 2016 cerró con un ejercicio muy positivo, según los expertos, se afianzó la reactivación ya iniciada en años anteriores. Los profesionales aseguraron que los datos confirmaban el buen momento que estaba viendo el mercado inmobiliario tras casi una década de ajustes. Con un contexto político que no acompañaba a la mejora, parece que durante el pasado año el sector inmobiliario consolidó su tendencia a la normalización y comenzó a ser atractivo de nuevo para el inversor. Pese a todo esto, no se puede ignorar que la recuperación sigue en marcha y que será lenta, moderada y muy desigual.
Una de las ciudades que se ha consolidado definitivamente como polo de atracción para la inversión inmobiliaria es sin duda Barcelona, una de las más vanguardistas de España. Compradores, tanto nacionales como internacionales, se centran ahora en esta ciudad para hacerse con propiedades, ya sea para su uso con primera o segunda residencia, como para inversión. Algunos estudios parecen confirmar la tendencia alcista del precio de la vivienda en la capital catalana, así como un incremento del volumen y del valor de las transacciones. Barcelona, junto con Madrid y Valencia, parece liderar definitivamente la recuperación del mercado inmobiliario. Por otro lado, las emblemáticas Ramblas han sido siempre objeto de atracción para grandes inversores y para la compra de edificios. Ahora, parece que el mercado inmobiliario de esta histórica zona de la ciudad condal ha acaparado tambien la atención de las grandes cadenas de moda, que optan por estas avenidas como el mejor escaparate para sus grandes tiendas. El interés por localizar los establecimientos en esta calle, se suma a la gran saturación que sufren otras calles más comerciales de Barcelona. Actualmente estos operadores ha elegido para abrir sus tiendas el tramo medio de la calle, que hasta ahora no era el foco del retail, ya que el circuito comercial se centra más en la parte superior de las Ramblas, donde desembocan tres calles de gran actividad de consumo.
Para 2017, los expertos confían en que el sector seguirá avanzando en esta tendencia positiva, incluso contando con la moderación del crecimiento económico que auguran las previsiones macro económicas del Gobierno y de diversos organismos.