PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD DE LA UNESCO
Nahal Me’arot, la mejor forma de estudiar la prehistoria en Israel
Beatriz Jiménez
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Beatriz Jiménez (@beathecoolplan)
domingo 01 de febrero de 2015, 10:45h
Haifa, y en concreto, el Monte Carmelo con su reserva natural de Nahal Me’arot, constituyen uno de los puntos fundamentales para estudiar la prehistoria y unir los lazos entre el Homo Sapiens y el Homo Neanderthalensis, es uno de los puntos turísticos más importantes de la zona.
El Monte Carmelo, donde se localiza la ciudad israelí de Haifa, cuenta con más de ocho hectáreas de reserva natural, lo que le constituyen como una de las mayores reservas de todo Israel y donde se encuentran una gran cantidad de secretos que los Homo Sapiens y Homo Neanderthalensis dejaron en la tierra. Un enclave turístico que unen los trabajos de arqueología de la zona con visitas y rutas para todas las edades. Con miradores panorámicos desde donde ver el Valle de Israel, pasando por la Alta Galilea o las playas del Mediterráneo, que no deja a nadie indiferente además de tener la posibilidad de realizar tranquilos picnic en sus laderas.
El cuento de la Prehistoria
La reserva natural de Nahal Me’arot, ubicada en la ladera occidental de la montaña, cuenta como vivía en la prehistoria los hombres que habitaban esas tierras en el momento en el que dejaron de ser nómadas para convertirse en sedentarios y desarrollar la agricultura y la ganadería. El enclave cuenta con una exposición audiovisual y un sendero turístico que recorre las cuevas en las que tanto el Homo Sapiens como el Neanderthalensis habitaron.
El conjunto de cuatro cuevas (Tabun, Jamal, Skhul y el-Wda) han sido ocupadas por diferentes poblaciones durante 500.000 años por lo que los yacimientos son una fuente muy importante de revelaciones de su forma de vida, secretos que no ha pasado de largo para la Unesco que lo ha catalogado como Patrimonio de la Humanidad, por lo que lo considera un espacio digno de ser conservado.
Convivencia entre el Homo Sapiens y el Homo Neanderthalensis
Entre los restos destacan las muestran de que el Homo Sapiens y el Homo Neanderthalensis tuvieron una convivencia en las tierras y ha dado resultados importantes en el estudio de la transición entre el Paleolítico y el Neolítico, o lo que es lo mismo, el paso del nomadismo al sedentarismo. Nahal Me’arot cuenta con las construcciones de piedra más antiguas del mundo a la vista de los visitantes de la zona.
Un enclave único que une el presente con el pasado más remoto de la humanidad y lo que supuso el gran cambio de una vida nómada a una vida sedentaria.
Más información en: http://www.goisrael.es/Tourism_Spa/Paginas/default.aspx