Parece que los efectos de las medidas del BCE empiezan a notarse en los hogares que necesitan financiación, que han visto como la concesión ha aumentado y los precios han bajado. No obstante, no todo son buenas noticias. Los tipos oficiales en mínimos históricos han perjudicado a los ahorradores, que han visto como las rentabilidades de los productos de ahorro clásicos caían hasta mínimos insospechados, señalan desde el comparador HelpMyCash.com.
El horizonte de tipos de interés raquíticos que se presenta parece pronosticar una Europa en la que los ahorradores se verán gravemente perjudicados, mientras que los que buscan financiación tendrán mayores facilidades de acceso al crédito y, sobre todo, podrán hacerlo asumiendo costes más reducidos.
Eso sí, a la hora de solicitar financiación no solo hay que tener en cuenta el tipo de interés. Las comisiones y los productos vinculados son sumamente importantes, más ahora que los intereses están bajando y la banca intenta compensar la baja rentabilidad del sector con la comercialización de otros productos (seguros, planes de pensiones, etc.).
Si necesitamos un préstamo lo ideal es que tenga un tipo de interés por debajo de la media, que no tenga comisiones, sobre todo de apertura, estudio y amortización anticipada, y que esté exento de productos vinculados o, como mucho, que tenga solo uno. De esta forma, evitaremos pagar de más. Actualmente,
los mejores préstamos del mercado actual cumplen con las premisas anteriores: es el caso del Crédito Proyecto de Cofidis (desde el 4,95 % TIN) o del Préstamo Personal de Cetelem (desde el 5,95 % TIN). Ambos sin comisiones y sin productos extra.