1/ El republicanismo hoy en día en Occidente es un compendio de valores, una visión de la sociedad y NO una forma de Jefatura de Estado. Reducirlo a esto último es una forma de engaño
2/ Buen ejemplo de ello es que dónde mejor florecen los valores republicanos es en las monarquías parlamentarias como Suecia o Gran Bretaña y el totalitarismo florece en repúblicas (China, Corea del Norte, Cuba…).
3/ Porque el republicanismo, en simple, consiste en una sociedad unida de ciudadanos soberanos, libres, iguales y solidarios. (“Liberté, égalité, fraternité”) Exactamente lo opuesto al totalitarismo de cualquier calaña.
4/ Por eso el debate en España no debe ser, en este momento agónico, quién ha de ser el Jefe del Estado, sino hasta qué punto se respetan y fortalecen los valores republicanos que impregnaban el 90% de nuestro texto constitucional, y hasta qué punto han sido traicionados o prostituidos. Y por quienes.
5/ Si nos detenemos en el valor toral de la soberanía popular, pivote central de nuestra Constitución, hemos de recordar, remedando cierto célebre decreto republicano que: ”Todos los privilegios especiales de provincias, ciudades y comunidades, financieros o de otra clase, son abolidos y absorbidos en los derechos comunes de los ciudadanos”. Es evidente, y muy lamentable, que en España ha sucedido todo lo contrario, y cada día más, siendo así que la soberanía reside más y más en cacicatos y regiones. Es fácil adivinar a qué Partidos se debe esta deriva anti republicana, pero no olviden a ninguno…
6/ En el caso de la libertad no estamos tan mal, pero, de nuevo y “de facto”, la opresión y el amedrentamiento totalitario que se vive en determinadas regiones, y el hecho de que se haya perdido el derecho y la libertad de estudiar, en cualquier rincón de nuestra Nación, en el único idioma común a todos los compatriotas, tiene muy poco de republicano. Algunos Partidos lo promueven, otros lo permiten…
7/ Fijándonos en la igualdad, la esencial y política como ciudadanos, es un absoluto desastre. A nadie se le escapa que, atrozmente, en nuestra Patria hay ciudadanos de primera, segunda, … y cuarta. Algunos Partidos lo promueven, otros lo permiten…
8/ Finalmente, la solidaridad fraternal. Esta es la más fácil, porque sencillamente, no existe. Pueden existir dádivas, limosnas, donaciones altruistas, en disputa para conseguir votos, pero estructuras solidarias de Estado y conciencia de hermandad con todos los compatriotas sin discriminación de raza, origen, ubicación o credo, nada de nada. Baste recordar la merienda de negros en la que se convierte cualquier asignación de fondos o, más terrible, los homenajes permitidos y prebendas solicitadas para terroristas y criminales que tanto mal hacen a nuestros conciudadanos. Algunos Partidos lo promueven, otros lo permiten.
Llegados a este punto, nos parece aún más interesante lanzar un verdadero debate sobre el republicanismo social en España, pero con dos observaciones previas. La primera es que los Partidos que más descaradamente atentan contra los valores republicanos son los que lideran la maniobra contra el jefe del Estado y que, en España, lo poco que queda contra el deterioro absoluto de dichos valores es la Institución Monárquica. Por eso, siendo de formación y convicción republicana, defenderíamos la elección de un Presidente de la República, en este momento, en cualquier sitio menos en España. Aquí sería culminar la llegada de los totalitarismos.