La moneda única opera en línea con la caída de más de 2% frente al dólar tras la presentación de la Fed la semana pasada, poniendo en evidencia que la fortaleza relativa del par es muy susceptible a la dinámica más amplia del billete verde. Con pocos eventos domésticos marcados en la agenda, los mercados europeos oscilan en función del sentimiento más amplio de riesgos, que se ha nublado con la amenaza que supone el surgimiento de la variante delta del virus en el continente. Alemania, en particular, continúa advirtiendo contra los viajes no esenciales al Reino Unido producto del resurgimiento de los contagios en esa localidad. La presidenta del BCE, Christine Lagarde, testifica hoy ante el parlamento europeo, un evento que podría capturar la atención de los inversores en busca de mayores señales sobre el programa de estímulos PEPP. Sin haber definido con precisión la ruta crítica del programa.
El billete verde abre la jornada con un tono débil tras el rally de la semana pasada impulsado por las perspectivas más optimistas de la Reserva Federal. La mediana de votos sobre la ruta de tipos de interés ahora señala dos posibles subidas para el 2023, de una senda neutral prevista anteriormente. Esta narrativa se filtró en los mercados con un giro positivo del dólar y otros activos norteamericanos, llevando al índice DXY a máximos desde abril tras el anuncio de la Fed. Esta mañana, el dólar corrige parte de esos movimientos tras una caída de los rendimientos de la renta fija estadounidense derivada de un desplome de las bolsas asiáticas. Los rendimientos del Tesoro a 30 años cayeron por debajo del 2% por primera vez desde febrero y los bonos a 10 años se deslizaron a sus mínimos en cuatro meses. Mientras los mercados advierten precaución ante los riesgos remanentes, la última presentación de la Fed también advierte sobre una retirada de los estímulos antes de lo previsto. Los mercados se mantendrán atentos a cualquier señal que valide estas expectativas, con una banda de oradores de la Fed presentándose a las cámaras esta semana. Hoy hablarán James Bullard, Robert Kaplan y John Williams, vísperas de la publicación de la medida de inflación más observada por la Fed el próximo viernes.
La libra ha comenzado la semana con el pie delantero después de sufrir pérdidas sustanciales la semana pasada tras la presentación de la Fed. Sin embargo, el avance de la moneda esta mañana es marginal, siendo reveladora de un prudente apetito por el riesgo. Sin una tendencia macroeconómica fuerte, los mercados continúan asimilando la última decisión de la Fed y es probable que el tono en el mercado de divisas lo establezca la acción del precio de la renta fija norteamericana a la apertura de ese mercado. En el frente del Covid, el gobierno británico justifica su decisión de mantener las restricciones sobre los viajes internacionales, indicando que unas vacaciones “normales” este verano «nunca iban a ser el caso». Es probable que el gobierno continúe enfrentando presión para responder preguntas sobre este tema durante las próximas semanas, tras el regreso de Boris Johnson de la cumbre del G7. Mientras tanto, en el frente económico, los mercados esperan los últimos datos de PMI de junio el miércoles, mientras que el Banco de Inglaterra anunciará su última decisión política el jueves. La presentación deberá producir escasas novedades esta semana, aunque las minutas de la reunión ofrecerán a los inversores una evaluación actualizada del Banco sobre las condiciones económicas actuales.
El peso mexicano se ha deslizado cerca de un 6% frente al dólar desde los máximos de la semana pasada, cuando el par perdió una importante resistencia conquistada en las últimas semanas. El giro “hawkish” en la guía de política de la Fed fue el principal promotor de estos movimientos, demostrando la alta vulnerabilidad del peso mexicano a la narrativa de la política monetaria estadounidense. Esta semana, Banxico tendrá su presentación ante los inversores, que esperan un giro similar en la guía de política mexicana pese a que no se esperan subidas de tipos en el corto plazo. Señales de ajuste monetario por parte de Banxico probablemente no serán favorables para la racha alcista que traía el peso en los últimos meses, siendo la postura monetaria acomodaticia de Banxico la principal fuente de estímulo económico para el país. En la jornada de hoy, el peso estará digiriendo los titulares sobre la extensión del cierre de las fronteras de EE.UU. hasta el 21 de julio al menos, una medida que ha estado en vigor desde el año pasado. El resto de la semana, los inversores centrarán la atención en el reporte de inflación de la primera quincena de junio y la presentación de Banxico el próximo jueves.