El presidente del PPN considera que “el hecho de que el juez haya mandado a prisión a Santos Cerdán y no lo haya hecho con Ábalos o Koldo García pone en evidencia que el socialista navarro, su amigo, es el núcleo de una presunta organización criminal. Al igual que era el núcleo del Partido Socialista de Navarra, el negociador con Bildu y quien marcaba las directrices del Gobierno de Navarra”.
Para García, “la presidenta Chivite no puede ser ajena a todo esto, puede hablar o no en sede parlamentaria, pero tarde o temprano lo va a tener que hacer. Pensar que no conocía nada de lo que pasaba a su alrededor, es cuanto menos ingenuo”.
García se pregunta “qué más argumentos hacen falta para que la presidenta Chivite presente su dimisión inminente. En poco más de quince días hemos visto cómo Santos Cerdán, su principal valedor y con gran peso en las decisiones de su gobierno, presenta su dimisión como secretario de organización del PSOE; otra persona de su máxima confianza, Ramón
Alzórriz, dimite como vicesecretario general del PSN y portavoz parlamentario, precisamente por haber perdido la confianza de la presidenta; Santos Cerdán pasa a ser imputado y, tras declarar esta mañana ante el Tribunal Supremo, es enviado a prisión”.
“Chivite habrá perdido la confianza en sus amigos Cerdán y Alzórriz, pero se la ha robado al conjunto de los navarros, que ya ni confían en ella ni en las instituciones y, si todavía le queda alguna duda, lo que debe hacer es preguntárselo directamente a los navarros en las urnas”, ha defendido García.
El presidente del PPN ha advertido de que “el deterioro que sufre el Gobierno de Navarra es ya irreversible y la única salida digna que le queda es presentar su dimisión. ¿Hasta cuándo va a estar la presidenta Chivite negando la mayor y mirando hacia otro lado? Navarra y los navarros merecemos conocer la verdad y un gobierno que actúe de manera implacable contra la corrupción”.