En términos absolutos, el upskilling digital de la fuerza laboral incrementaría el PIB español en unos 132.000 millones de dólares en 2030. Los nuevos puestos de trabajo generados supondrían un incremento del empleo del 1,2% y la productividad aumentaría un 9,5%. El sector más beneficiado, en nuestro país sería el de Servicios a Empresas -incluye desde los servicios profesionales hasta la externalización de cuestiones como la limpieza o la seguridad-, que en la actualidad supone el 22% del PIB español y que crecería un 7,3%, en torno a los 32.000 millones de dólares, seguido de la Industria (+7% y unos 17.000 millones de dólares) y el de Consumo (+6,5% y 22.000 millones de dólares), aunque todos los sectores experimentarían crecimientos de la actividad relevantes.
El documento resalta la importancia de una mayor colaboración público y privada, entre los gobiernos y los responsables empresariales, para impulsar las iniciativas de capacitación digital de los empleados en todo el mundo e incluye, además, otras conclusiones interesantes:
China (1.986MM$), Estados Unidos (902.000 M$), India (571.000 M$), España (132.000 M$) y Reino Unido (119.000M$) son los países que obtendrían más ganancias en términos absolutos. Si hacemos el análisis en porcentaje del PIB, China (+7,5%), India (+6,8%), España (+6,7%) y Australia (+5,9%) liderarían la clasificación.
Por sectores, más de la mitad del incremento del PIB mundial en 2030 vendrá de los segmentos de Servicios a Empresas, Consumo e Industrial. Otros sectores que, tradicionalmente han experimentado crecimientos menores durante décadas, como los de Salud y Cuidados Sociales, pueden beneficiarse también significativamente de las políticas de upskilling.
Alemania o Japón serán algunas de las economías desarrolladas con menos incrementos en términos de crecimiento económico -un 0,3% y un 0,2%, respectivamente-, como consecuencia de su alta productividad y de la buena capacitación de sus profesionales.
Dotar a los empleados de todo el mundo de las capacidades digitales necesarias en los próximos años transformaría la economía mundial para hacerla más intensiva en conocimiento: las máquinas y las tecnologías se ocuparían de las labores más rutinarias y las personas de las de mayor valor añadido.
El informe pone sobre la mesa algunas recomendaciones para poner en marcha los programas de capacitación digital de los mercados laborales de todo el mundo. Estas recomendaciones pasan porque
los Gobiernos, empresas y el sector de educación trabajen conjuntamente; porque los Estados impulsen con agilidad y rapidez las distintas iniciativas nacionales, en colaboración también con las ONGs, y porque las empresas incrementen sustancialmente sus inversiones en la formación de sus profesionales como algo fundamental para sus negocios.
Las estimaciones incluidas en el estudio se realizan a partir de dos escenarios. Un escenario base, en el que las economías cierran el gap de capacidades de sus mercados de trabajo en 2030 y otro, acelerado, en el que este fenómeno se produce en 2028. Las cifras incluidas en esta nota de prensa corresponden a las del escenario acelerado. El informe completo con todas las estimaciones está disponible en www.pwc.com/shared-prosperity