¿En qué consiste? Pues se trata de un proceso de selección donde las empresas ya no son quienes publican ofertas de empleo, sino que son los candidatos quienes se “ofrecen”.
Esta nueva modalidad se da especialmente en redes sociales o portales de empleo: espacios que ofrecen la posibilidad a los profesionales de diseñar perfiles ceñidos al tipo de empleo que desean y que, por tanto, facilitan la búsqueda de candidatos idóneos a los empleadores.
Aunque, cabe señalar, que esta práctica también toma otras formas, como la sección dedicada a buscar talento que muchas empresas habilitan en su página web, donde no se lanza necesariamente una oferta específica, sino que se deja la puerta abierta a posibles interesados.
Pero, ¿esto en que se traduce realmente? Desde Pluxee, hemos visto que tiene grandes ventajas, tanto para las empresas como para los candidatos.
Una de las más notables es que potencialmente algunos procesos se vuelven más ágiles y eficaces, ya que hay un número más reducido de candidatos. Generalmente, los candidatos que se valen de estas herramientas, no están buscando trabajo activamente, sino que están abiertos a nuevas y mejores oportunidades de empleo. Esto implica mayor precisión ya que
permite preseleccionar candidatos con anterioridad a la recepción más masiva de candidaturas una vez se publica una posición.
Por otro lado, este formato genera propuestas muy diversas, al ser los candidatos quienes se postulan y no la empresa quien pide un perfil específico: una dinámica que no solo fomenta la diversidad, sino que también puede ayudar a las empresas a sumar perfiles con características y aptitudes que necesitaban pero no lo sabían.
Por todas estas razones, podríamos concluir que si optas por el reclutamiento inverso, tendrás probablemente candidatos más capacitados para cubrir tus necesidades particulares; profesionales activos, que siguen adquiriendo expertise y habilidades; candidaturas que se aproximan más al perfil que buscas o te revelan aquel que ni siquiera sospechabas que necesitabas.
“El reclutamiento inverso llegó para complementar los procesos de selección tradicionales. Para ejecutarlo con éxito es clave que tu empresa sea atractiva y que constituya un espacio donde de verdad las personas quieren trabajar. Para ello, es importante que cuentes con una buena imagen de marca, que ofrezcas beneficios a tus empleados que garanticen un balance entre sus vidas dentro y fuera del trabajo, que les proporciones planes de retribución que se adecuen a sus necesidades y que fomentes la confianza y el bienestar en tus equipos. Así, será más fácil que atraigas esos talentos que tanto buscas y que, de paso, se comprometan y permanezcan contigo”, afirma
Miriam Martín, directora de Marketing y Comunicación de Pluxee.