En los últimos años, Uzbekistán ha sido testigo de la activa participación e implicación de los ciudadanos en las reformas en curso y en la administración pública, lo que resulta especialmente importante en la adopción de documentos que se convertirán en los criterios del destino futuro del país.
En particular, la "Constitución popular", aprobada en 2023 por primera vez en la historia de Uzbekistán sobre la base de la expresión universal de la voluntad, se ha convertido en un programa para sentar las bases del destino y el futuro feliz del país. En la elaboración del proyecto de la Constitución se recibieron más de 220.000 propuestas de diversos sectores de la población, lo que también es un ejemplo de la preocupación del pueblo por la gobernanza del Estado y el destino del país.
Así, gracias, sobre todo, a las sugerencias de la población, así como a un estudio en profundidad de la experiencia constitucional y las normas de 190 países, el número de artículos de la Constitución actualizada aumentó de 128 a 155 y el número de normas de 275 a 434.
Prueba de la participación activa de los ciudadanos en la administración pública de Uzbekistán es también el portal de debate de proyectos de leyes y reglamentos para recibir propuestas de la población sobre proyectos de programas, leyes y reglamentos estatales (https://regulation.gov.uz/), y en los últimos siete años se han recibido 77.731 propuestas de la población.
Otro punto importante es que la proporción de mujeres en la administración pública de Uzbekistán ha aumentado del 27% al 35% en los últimos años. En particular, el 32% de los diputados de la Cámara Legislativa del Parlamento del país (Oliy Majlis) y el 25% de los miembros del Senado son mujeres. El número de mujeres empresarias se ha duplicado, y el número de mujeres que han abierto su propio negocio ha superado las 205.000.
Especialmente significativo es el hecho de que Uzbekistán se encuentre entre los cinco países del mundo con mayor crecimiento en términos de igualdad de género según el índice del Banco Mundial, y entre los 20 primeros en el índice de datos abiertos sobre género.
Se presta mucha atención a la esfera económica, que afecta directamente a la calidad de vida en Uzbekistán. En los últimos siete años, la cuantía de los fondos asignados a la sanidad se ha sextuplicado. Los hospitales se están dotando de equipos modernos y se están construyendo los nuevos.
Uzbekistán está llevando a cabo medidas sistemáticas para proporcionar apoyo social a la población, identificar las causas profundas de los problemas de cada estrato de la población y proporcionar asistencia específica, especialmente para reducir la pobreza.
Cabe señalar que desde 2017 se organizan oficinas virtuales y de Recepciones Populares del Presidente de la República de Uzbekistán. En el período de 2017 a 2021, el centro de recepción virtual del Presidente y las Salas de Recepción del Pueblo recibieron más de 5 millones 780 mil solicitudes, de las cuales más de 3 millones 288 mil fueron satisfechas. Como resultado del estudio completo, oportuno y conforme a derecho de los recursos, el grado de satisfacción de los mismos aumenta cada año. En particular, en 2017 este indicador fue del 47,5%, en 2018 - 53,9%, en 2019 - 60,9%, en 2020-60,4%, en 2021 - 86,7%.
En los últimos años en Uzbekistán, la idea de "El hombre, la sociedad y el Estado" se ha convertido en un principio estratégico irrevocable, y se han llevado a cabo reformas fundamentales en el ámbito de la atención al individuo y la protección de sus derechos e intereses; en particular, las actividades relacionadas con los derechos humanos se han consagrado legalmente como valor supremo a través de la Constitución actualizada. Hay que reconocer el hecho de que se están llevando a cabo reformas en todos los ámbitos relacionados con el individuo y sus actividades de conformidad con las normas internacionales.
Más de 2.200.000 familias, entre ellas muchos jóvenes, necesitan ayuda social. Este año está previsto triplicar las obligaciones sociales del Estado.
Se presta especial atención al fortalecimiento de las relaciones amistosas de Uzbekistán con la comunidad internacional y, sobre todo, con los Estados vecinos sobre la base de la cooperación, el apoyo mutuo, la paz y la concordia, y se refuerza la base jurídica para seguir profundizando en las reformas de la política exterior emprendidas en los últimos años. Garantizar una vida digna a los ciudadanos, la concordia interétnica e interconfesional, el bienestar y la prosperidad de un Uzbekistán multiétnico es también uno de los ámbitos más importantes de atención en Uzbekistán.
La fundación "Compatriotas" fue creada para apoyar a nuestros compatriotas en muchos países del mundo y estrechar aún más nuestros lazos con ellos. La labor encaminada a fortalecer el ambiente de armonía y tolerancia interétnicas en Uzbekistán está alcanzando un nivel cualitativamente nuevo. La fecha del 30 de julio, que cada año se celebra ampliamente como Día Internacional de la Amistad, ha sido declarada "Día de la Amistad de los Pueblos".
En política exterior ya se han identificado las futuras tareas estratégicas que servirán de continuación consecuente de las acciones, sobre todo en lo que se refiere a una política exterior y una diplomacia económica profundamente meditadas.
A este respecto, en primer lugar, es aconsejable llevar a cabo cualitativamente tales tareas prioritarias como el fortalecimiento ulterior de las relaciones de estrecha amistad, buena vecindad y asociación estratégica con los países de la región, la ampliación de las relaciones mutuamente beneficiosas y multifacéticas con los países del extranjero próximo y lejano, especialmente con el vecino Afganistán, la continuación de la ayuda al pueblo afgano en el restablecimiento de la vida pacífica, la realización de grandes proyectos de transporte y comunicación conjuntamente con este país. Al mismo tiempo, el propio período exige llevar a un nuevo nivel las relaciones multilaterales con las organizaciones regionales internacionales y las instituciones financieras.
En resumen, el nuevo Uzbekistán avanza audazmente con reformas sistémicas hacia el desarrollo sostenible, construyendo una sociedad abierta y justa en la que el ser humano, su vida, su libertad, su honor y su dignidad son el valor supremo y tienen un significado milenario.