Algo esencial en las mudanzas a Bélgica, por ejemplo, uno de los destinos más frecuentes para diplomáticos, políticos y embajadores españoles. Debido a la propia sensibilidad de su profesión, estos requieren de una planificación especializada que contemple las particularidades del país.
No en vano, una mudanza bien realizada no solo tiene en cuenta aspectos técnicos sino que también contempla aspectos culturales y administrativos. Organizar una mudanza internacional para diplomáticos no solo implica trasladar pertenencias, también supone proteger la integridad y el bienestar de quienes representan a nuestro país.
Características de una mudanza internacional segura
La seguridad, confidencialidad y el cumplimiento normativo constituyen los pilares fundamentales de cualquier mudanza diplomática. Esta, por supuesto, debe proteger tanto los bienes personales como información sensible.
Por ello, los protocolos de seguridad deben implementarse desde la planificación inicial hasta la entrega final en destino. Asimismo, la discreción resulta imprescindible para mantener la integridad de la función diplomática durante todo el proceso de traslado.
De ahí que a la hora de abordar una mudanza de estas características haya que contar con empresas que acrediten una importante experiencia acumulada, como Grupo Amygo, con más de 30 años gestionando traslados de diplomáticos y directivos internacionales. Este conocimiento especializado y práctico garantiza el cumplimiento de protocolos específicos y la gestión adecuada de situaciones imprevistas.
Esto es algo que esta compañía observa en sus mudanzas a Bélgica, destino que requiere una atención especial debido a los trámites multilingües y a la diversidad cultural que caracteriza este país sede de importantes instituciones europeas.
Si bien es cierto que Bélgica cuenta con unas excelentes conexiones con otros destinos, facilitando la mudanza, también exige un conocimiento específico de normativas comunitarias y de los procedimientos administrativos, ya que estos pueden llegar complicar toda la gestión si se carece de un asesoramiento experto.
De ahí que, a la hora de abordar una mudanza para diplomáticos, hay que tener en cuenta los siguientes pasos:
Planificación previa: pasos esenciales
Lo recomendable es iniciar los preparativos con 2-3 meses de antelación para contar con el tiempo suficiente para completar todos los trámites administrativos y logísticos necesarios. Así será posible identificar posibles obstáculos y desarrollar soluciones antes de que se conviertan en problemas. En esta fase, algunos de los pasos que no debemos olvidar son:
- Inventario detallado de bienes: Catalogación completa de pertenencias y valoración
- Revisión de normativas aduaneras: Análisis de restricciones y requisitos específicos
- Selección del transporte: Evaluación de opciones aéreas, marítimas y terrestres
- Contratación de seguros: Cobertura integral para bienes y responsabilidad civil
Particularidades según destino
Cada destino diplomático presenta particularidades únicas que requieren una adaptación de procedimientos y documentación, desde requisitos aduaneros hasta normativas que, sin lugar a dudas, pueden variar entre países. El conocimiento de estas especificidades evita retrasos y complicaciones que, al final, podrían afectar el calendario diplomático.
Por ejemplo, las mudanzas a Irlanda requieren cumplir con requisitos aduaneros específicos, lo que implica la presentación de documentación y la gestión aduanera necesaria para la importación temporal de bienes diplomáticos.
Entre los documentos esenciales que se deben presentar se incluyen una copia del pasaporte, una lista de empaque, el Documento de Transferencia de Residencia (TOR 1), y la prueba documental de residencia en el extranjero durante al menos 12 meses. Además, es importante contar con dos copias originales de facturas de servicios públicos y el contrato de arrendamiento o compra de vivienda en Irlanda.
Por su lado, las mudanzas a Reino Unido han experimentado cambios importantes en la época post-Brexit, complicando los procedimientos y aumentando la importancia de entregar la documentación completa. Para muestra, un dato: el 70% de las mudanzas en Europa actualmente implican trámites aduaneros adicionales como consecuencia directa del Brexit.
Embalaje y transporte: claves para la seguridad
Organización y documentación, pero sin olvidar la protección de lo transportado. Por ello, otro punto esencial en estos trámites recae en el uso de embalajes profesionales y materiales específicos, así como en la elección del transporte adecuado según el volumen y urgencia de la mudanza del diplomático.
Como has podido comprobar, las mudanzas internacionales no son nada sencillas. Menos si hablamos del cuerpo diplomático. De ahí la recomendación de contar siempre con profesionales, como los de Grupo Amygo, especializados y conocedores de las normas que rigen esos procesos en cada país.