Este nuevo entorno regulado permite a los inversores *comprar y vender participaciones en proyectos inmobiliarios* con facilidad, algo inédito hasta ahora en el sector. Además, el acceso se ha democratizado: es posible *invertir
desde tan solo 1.000 euros*, lo que abre la puerta a pequeños y medianos ahorradores interesados en diversificar su cartera entre distintas oportunidades, países y modalidades de inversión, como CRA y CRV.
Uno de los grandes atractivos del sistema es su liquidez y transparencia.
Los inversores pueden consultar en tiempo real la evolución diaria de sus participaciones, algo que tradicionalmente no era posible en las inversiones inmobiliarias convencionales. Este modelo se asemeja, en cierta medida, al funcionamiento de la bolsa de valores, pero aplicado al mercado inmobiliario, lo que aporta una trazabilidad total de cada operación y mayor seguridad para los usuarios.
En el ámbito fiscal, las inversiones realizadas a través de este sistema también presentan *diferencias significativas respecto a los modelos anteriores*. Los *rendimientos generados se consideran rendimientos del capital mobiliario*, mientras que las *plusvalías derivadas de la compraventa de participaciones tributan como ganancias patrimoniales*.
Estas últimas no están sujetas a retención en el momento de la transacción, siendo el inversor quien debe incluirlas en su declaración anual.
Para facilitar este proceso y mantener su compromiso con la transparencia, Hausera emite un certificado anual con las retenciones practicadas, permitiendo a los usuarios tener un control claro sobre su fiscalidad. Según el análisis publicado en su propio blog, este esquema ofrece una gestión fiscal más sencilla y adaptada al marco legal vigente, reforzando la confianza de los inversores.
El lanzamiento de este mercado secundario forma parte del proceso de expansión y consolidación de Hausera dentro del ecosistema *proptech*. Su reciente *salida a bolsa* refuerza su posicionamiento como una de las
compañías pioneras en la tokenización y digitalización de activos inmobiliarios. En un reciente vídeo divulgativo, los responsables de la compañía explicaron que el objetivo de este modelo es “*dar libertad, liquidez y control total al inversor*, transformando un sector históricamente rígido en un espacio flexible y dinámico”.
Con esta propuesta, Hausera no solo se posiciona como un referente en innovación, sino que redefine la manera de entender la inversión inmobiliaria en Europa: más accesible, más transparente y, sobre todo, más líquida.