Se ha detectado la posibilidad de que se produzca un sobrecalentamiento de los transistores de la Unidad de Control Electrónico del inversor o
Módulo Electrónico de Mando ECU, que transforma la corriente continua en alterna para poder hacer funcionar el motor eléctrico y viceversa.
La marca explica que, en el hipotético caso de producirse dicho sobrecalentamiento, si se llegase a deformar el transistor, podría suceder que el vehículo pasase a funcionar en modo de ‘conducción de seguridad’ (‘fail safe mode’), encendiéndose un testigo en el cuadro de instrumentos y reduciendo la potencia, aunque puede seguir circulando hasta un punto de estacionamiento o servicio.
Por todo ello, la marca realizará una llamada a revisión de la tercera generación del modelo para actualizar el software correspondiente. Para compensar a los clientes, los concesionarios oficiales ofrecerán también una inspección gratuita de 20 puntos clave del vehículo.