¿Por qué debemos estudiar varios idiomas tempranamente?

Ahora todo está cambiando pues nuestros jóvenes cada día más son bilingües pues desde pequeños han empezado esas enseñanzas. Aprender un idioma distinto a la lengua materna se puede y se debe iniciar tempranamente para que los niños se hagan auténticamente bilingües; es decir, para que lo asuman con tanta naturalidad como la lengua materna. Algunos padres piensan que puede ser contraproducente iniciar estos estudios tempranamente, mas están equivocados.

Antiguamente se creía que enseñar idiomas a un niño de un año no tenía ningún sentido porque podía confundirlo e, incluso, retrasar el desarrollo de su habla. Sin embargo, los niños de padres que manejan distintas lenguas, las aprenden con facilidad y no las mezclan. Los bebés acostumbran su oído al tono propio de otro idioma y, poco a poco empezarán a comunicarse diciendo palabras sueltas o frases y a pensar en la otra lengua (no a traducir). Así adquirirán un nivel en dicho idioma difícilmente alcanzable por un adulto.

Está demostrado que niños expuestos a varios idiomas desde pequeños son más creativos y desarrollan más habilidades .y, en un futuro, aprenderán con más facilidad otras lenguas. Estas ventajas afectarán a todo su vida porque, cuando sean ancianos, se retrasarán trastornos de memoria.

Los niños que entran en contacto muy tempranamente con varias lenguas se hacen más inteligentes porque se da una estimulación temprana de la misma. ¿Qué segunda o tercera lengua deben empezar a estudiar los niños? No importa si es inglés, chino, francés, alemán, italiano…, lo realmente importante es comenzar pronto y de forma lúdica para que les resulten atractivos y los niños sean plurilingües en un futuro.

Al aprender un idioma también ampliamos nuestra cultura; pues conocemos las costumbres, canciones, juegos, gastronomía, geografía o historia del país en que se hablan. Por tanto, dominar varios idiomas nos hace unas personas más inteligentes y multiculturales.