Esta semana vamos a detenernos en una frase muy reciente de Doña Soraya Saenz de Santamaría (SSS). Según informaciones publicadas, la ex Vicepresidenta del Gobierno declaró en juicio con obligación de verdad que frente al golpe no se declaró el estado de sitio en la región catalano/española para no limitar los derechos civiles de los españoles en esa región. Honradamente, no me lo puedo creer. ¿No le importaba al Gobierno de España los derechos civiles de millones de españoles sistemáticamente pisoteados por los presunto golpistas y sus secuaces violentos?¿No le preocupaba el derecho a que se apliquen las sentencias del TC?
¿No le preocupaba el amedrentamiento y la intimidación liberticida de las brigadas alentadas por el Presidente de la Generalidad? ¿No le preocupaba la policía regional cómplice en los actos limitativos de libertades o derechos civiles de más de la mitad de los habitantes regionales (universidad, Parlamento, hospitales, administración regional…? ¿No le preocupaba los derechos civiles de la moza de escuadra expedientada por gritar Viva España?¿No le preocupaba los derechos civiles de los guardias civiles perseguidos por una televisión pública?¿ No le preocupaba la terrible amenaza para los derechos civiles de los ciudadanos la impunidad de la preparación larga de un golpe de Estado institucional? ¿En manos de quienes hemos estado y estamos?
La realidad, y es de manual, es que las legislaciones de excepción, emergencia, sitio o salvación nacional en democracias se crean precisamente para eso: para proteger primero y restablecer después los derechos civiles de toda la ciudadanía gravemente amenazada o destrozada. SSS , si hubiese sido lúcida y competente en política, debía saber que habíamos llegado a un punto en que el estado de sitio o similar , tras haber perdido años en aplicar ( y prostituir ) el 155, era indispensable, precisamente para devolver los derechos civiles a los habitantes de la Cataluña hispana. Y lo es cada día más y por más tiempo. Hay algo peor que la comodidad o la cobardía: la lenidad.