www.elmundofinanciero.com

LA VERDAD POR DELANTE

Enrique Calvet
Enrique Calvet

Segunda parte. ¿Por qué nos andamos por las ramas?

· Por Enrique Calvet

domingo 13 de octubre de 2019, 08:57h
Vimos hace siete días que el no compartir la situación extra-ordinaria de España que justificaría una solución de emergencia indispensable y extra-ordinaria, a su vez, como un Gobierno de concentración nacional lo hace imposible. Si una parte de nuestros gobernantes no cree que nos enfrentemos a un primer golpe de Estado gravísimo, que España sea un Estado ampliamente fallido con inaplicación del Estado de Derecho, y que la pérdida de igualdad, solidaridad y libertad de los ciudadanos es alarmante, no ve situación extra-ordinaria.

Pero haberla, hayla, para nuestra desgracia, como bien saben en cancillerías extranjeras, verbigracia. Y aquí nace un segundo impedimento, la esencia y actitud de nuestros “líderes” políticos mayoritarios. Por decirlo someramente y sin hacer sangre, una mezcla de escandalosa incompetencia, mezclada con dosis desiguales de bisoñez exagerada, y, ¡ay dolor! un total desprecio a su deber de trabajar para el bien común de los españoles, produce que no sólo no puedan valorar el abismo en el que estamos, sino que no quieran admitirla y, peor aún, invierten muchas energías para camuflárnoslo y para engañarnos, como si España siguiera la senda de una pacífica dialéctica político democrática. En otras palabras, no son capaces de salir de la lucha Partidista, muy por debajo de la gravedad de la situación trágica y absolutamente transversal que padecemos. Y, con la verdad por delante, lo hacen “pro domo suo”, es decir para mantener (un poco más de tiempo) su poder y prosperidad personal. Como hemos señalado, el bien común de la inmensa mayoría de los españoles les pilla muy, muy, lejos.

Esto podría tener solución. Si miramos el ejemplo reciente de Italia, podemos recordar el Gobierno de Mario Monti, que sacó a Italia de un profundo abismo financiero económico (muy superior al habitual) con un Gobierno de salvación nacional compuesto por notables profesionales alejado de Partidos. Por supuesto un Gobierno de pocos años dispuesto a sacrificar sus pretensiones políticas personales, ya que las medidas que hubo de tomar nunca podrían haber sido populares en la época del twitter. Me lo comentaba un amigo, gigantesco periodista de los de verdad, hace poco: “¿Se podría encontrar un Monti en España para salvar, no su situación financiera, sino su unidad, su democracia, su Estado de Derecho y los valores de igualdad y solidaridad?” En nuestra modesta opinión, llegamos a otra imposibilidad. Por una doble razón: En Primer lugar, por el total abandono, alejamiento, o incluso huída, de la élite española, la moral e intelectual, de la política. Un gravísimo problema secular. Pero también porque en España nadie juega el papel que han jugado y siguen jugando los Presidentes de la República Italiana, junto a esa élite desaparecida. Sin duda alguna, porque nuestra estructura institucional no lo facilita, pero la realidad es que tampoco por ahí alcanzamos un ansiado Gobierno de salvación nacional.

Por lo tanto el navío sigue al garete. Y así va el otoño…

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (1)    No(0)
Compartir en Meneame enviar a reddit compartir en Tuenti

+
0 comentarios