El euro se mantuvo estable frente al dólar esta mañana después de caer medio punto porcentual durante la semana previa. La divisa enfrenta otra semana cargada de eventos, con las cifras del PIB alemán y el índice alemán de expectativas empresariales IFO programados para el martes. La divisa comunitaria probablemente también se inspirará en el Simposio Jackson Hole de la Reserva Federal de Estados Unidos el jueves, un evento en el que los principales banqueros centrales, ministros de finanzas y participantes del mercado financiero se reúnen para discutir la política monetaria y las perspectivas macroeconómicas.
El evento ha creado una volatilidad cambiaria significativa en el pasado, y este año los inversores están aún más atentos a las pistas sobre los próximos movimientos monetarios considerando la incertidumbre derivada de la pandemia. Aunque el centro de atención estará en la presentación de Powell el jueves, el discurse de Philip Lane del BCE ese mismo día ganará notable atención en búsqueda de señales sobre la posible expansión del programa de compras de €1.35 billones del banco. Hoy es un día ligero en el calendario, lo que deja al euro a merced del sentimiento de los inversores sobre el creciente número de infecciones del Covid en el continente europeo.
Aunque la debilidad del pareció ser una historia dominante en agosto, el dólar logró estabilizarse durante la última semana. Las actas de la reunión de la Fed de julio, menos “acomodaticias” de lo esperado, proporcionaron un factor de apoyo para el dólar, a pesar de la creciente preocupación por el virus en los EE.UU. Esta semana la atención se centrará en el SimposioES de Jackson Hole el jueves y viernes, que será desarrollado de manera virtual por primera vez en cuatro décadas debido al coronavirus. Se espera que el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, pronuncie un discurso sobre la tan esperada revisión del marco de política monetaria de la Fed y la guía de política hacia adelante.
Es probable que el dólar apunte a la baja si Powell comunica una mayor tolerancia a la alta inflación, en línea con las sospechas de que la Fed puede estar preparada para anunciar un objetivo de inflación promedio en las próximas reuniones una vez que se complete la revisión del marco de política. Es probable que también se discuta cualquier medida monetaria adicional, como el control de la curva de rendimientos o una indicación más precisa sobre el horizonte de normalización de los tipos de interés. Mientras tanto, la conferencia republicana esta semana capturará una amplia atención de los mercados, con el nombramiento oficial de Donald Trump como candidato presidencial. Con desventaja relativa en las encuestas, Trump realizará su discurso de nombramiento el próximo jueves. El calendario de datos fuera de estos grandes eventos también estará cargado, con la segunda lectura del PIB de Q2 el jueves y los datos de inflación de julio el viernes.
La libra disfrutó de un breve repunte el viernes antes de recortar sus ganancias, dejando los márgenes frente al dólar y el euro prácticamente sin cambios esta mañana en comparación con los rangos de negociación del jueves. Otro giro del Brexit ocurrió la semana pasada, con el negociador de la UE Michel Barnier advirtiendo sobre el plazo límite de la última ronda de conversaciones. Su equivalente en el Reino Unido, David Frost, criticó la posición de la UE sobre las ayudas estatales y la pesca, así como la negativa del bloque europeo a seguir avanzando en las conversaciones hasta que se resuelvan estos temas. Esta semana será relativamente tranquila para la libra esterlina, con la publicación de las ventas minoristas mañana como dato más relevante. El gobernador del Banco de Inglaterra, Andrew Bailey, hablará en el simposio virtual de Jackson Hole el viernes.
El peso mexicano ganó terreno frente al dólar al cierre de la semana, de cara a la conferencia republicana y la presentación de Donald Trump como candidato a las elecciones presidenciales de los EE.UU. En el frente domésticos, las minutas de la reunión de Banxico, que se publicarán el próximo 27 de agosto, añadirán pocos detalles adicionales al anuncio de política de la semana pasada.
Después de recortar otros 50 puntos básicos de las tasas de interés en la reunión de agosto, el Banco de México aún tiene terreno para una mayor relajación monetaria. Sin embargo, el camino a seguir por Banxico está lejos de ser claro. Según la comunicación del Banco, los riesgos para las perspectivas de inflación siguen siendo muy inciertos, aunque el sesgo es predominantemente a la baja debido a la amplia holgura económica. No obstante, los posibles efectos indeseados sobre la cuenta de capital y la divisa impiden que el banco central adopte medidas de política excesivamente agresivas en lo adelante. Mientras Banxico examina de cerca la respuesta económica al estímulo introducido en los últimos meses, los datos entrantes de inflación serán una mejor guía para ajustar las expectativas del mercado sobre la política monetaria. Los datos quincenales de inflación se publicarán esta tarde, mientras que el informe trimestral de inflación de Banxico se publicará el miércoles.