La moneda única opera esta mañana sin una dirección clara ante el esperado evento de Jackson Hole, donde participarán importantes figuras de la banca central como el jefe de la Fed Jerome Powell y el miembro del BCE Philip Lane. Si bien el discurso de Powell podría otorgarle un impulso favorable al par EURUSD en tanto la Fed señala un prolongado horizonte acomodaticio de la política monetaria norteamericana, la intervención de Lane podría hacer lo mismo por parte del BCE. Dado que las perspectivas de normalización monetaria están ancladas en varios años vista, los inversores seguirán observando de cerca la evolución de las economías ante la actual situación de la pandemia para anticipar los movimientos del mercado en el corto plazo.
En este sentido, las mayores economías europeas continúan registrando una propagación creciente del virus, aunque los gobiernos ya han señalado su resistencia a retornar a un confinamiento masivo como en los meses de marzo y abril. La reanimación económica también dependerá en gran medida de las iniciativas de estímulo fiscal en el área, con el paquete de rescate comunitario en el centro de la acción. No obstante, las previsiones de que Europa retorne a la postura de disciplina fiscal tradicional una vez pasado el impacto inicial del virus imponen barreras al crecimiento europeo. Alemania ayer señaló que la mayor parte de los €15.2 mil millones que recibirá de la UE serán destinados evitar el crecimiento de la deuda, en lugar de a una ampliación de nuevas iniciativas de crecimiento.
El dólar cotiza con cautela previo al evento principal de la semana, el simposio de Jackson Hole, que será celebrado de forma virtual por primera vez en cuatro décadas. El discurso del presidente de la Fed, Jerome Powell, será la principal comparecencia del día. Muchos participantes del mercado esperan que Powell aproveche la oportunidad para delinear un cambio importante en el enfoque de la Fed sobre las metas de inflación. De una tolerancia a la inflación cercana a la meta del 2%, la Fed lleva unos meses estudiando el cambio a un objetivo simétrico sobre el 2%, que tendrá implicaciones decisivas para la política monetaria. En consecuencia, el giro estratégico de la Fed llevará a mantener los tipos de interés bajos por un tiempo más prolongado, mientras el mercado laboral se recupera gradualmente. La formalización una meta de inflación promedio, o una meta de política explícitamente simétrica, será uno de los principales resultados de la revisión del marco de política de la Fed, que probablemente se complete en un futuro cercano. Otro cambio de política probable es una orientación más clara de la guía de normalización monetaria vinculada a resultados específicos de la economía. No es probable que Powell anuncie explícitamente estos cambios importantes en el discurso de hoy, pero la forma en que describa el panorama macroeconómico será de gran relevancia para señalar venideros anuncios en esta dirección. Como resultado, el dólar podría ratificarse en su reciente sesgo bajista.
La libra disfrutó ayer de un segundo día de ganancias frente al euro y al dólar, mientras los mercados se preparan para el histórico discurso de Jerome Powell en el simposio de Jackson Hole de la Fed. El economista jefe del Banco de Inglaterra, Andy Haldane, dijo en un discurso que los bancos centrales solo pueden desempeñar un papel “modesto” para abordar la desigualdad económica derivada de la crisis del coronavirus, al tiempo que reconoció que muchas desigualdades en los ingresos, la riqueza y la falta de vivienda se han agravado por la crisis. Las bajas tasas de interés del Banco de Inglaterra, combinadas con la exención del impuesto de timbre del Gobierno, son políticas cuyo efecto marginal probablemente sea el aumento de los precios de la vivienda, una fuente potencial de la desigualdad mencionada por Haldane. El gobernador del Banco de Inglaterra, Andrew Bailey, tomará la escena en el simposio virtual en la agenda de mañana, probablemente haciendo mención de estos temas.
El peso mexicano ganó un modesto territorio frente al billete verde en la sesión de ayer, después de que la segunda lectura del PIB en el segundo tercio del año fuera revisada ligeramente al alza. La variación trimestral, de -17.1% frente al -17.3% proyectado inicialmente, reflejó el efecto de las revisiones alcistas de las actividades primarias y secundarias, mientras que el valor agregado de los servicios fue aún más contractivo. En términos interanuales, la actividad económica cayó un 18.7%, duplicando las contracciones de la economía mexicana durante la crisis financiera de 2009 o el colapso de 1995 con la Crisis del Tequila. A pesar del desbalanceado panorama económico derivado de la pandemia que enfrenta México, el banco central está más limitado a introducir mayor estímulo debido a un creciente ritmo inflacionario. Hoy los inversores mirarán al detalle las actas de la reciente reunión de Banxico, en búsqueda de pistas sobre los posibles movimientos de los tipos de interés.