"Esta medida no pretende servir para fortalecer el catalán, lo que pretende es relegar al castellano a un segundo plano, perjudicando al bilingüismo habitual que hay en Cataluña".
"Además, esta mesa de negociación confirma que institucionaliza la seguridad jurídica y pone de manifiesto que el PSOE y PSC dejan tirados a sus votantes catalanes. Está claro que el PSOE, entre catalanes e independentistas, elige a los segundos", ha añadido Parera.
Desde Valents piden que se garantice siempre el uso de ambas lenguas, los ciudadanos tienen todo el derecho a ser atendidos en la lengua oficial de su elección, un hecho que la administración catalana suele incumplir en la mayoría de las comunicaciones oficiales.