París es más que la Torre Eiffel: el Louvre y el Palacio de Versalles

El Louvre

El Louvre es, junto al Museo del Prado, el Museo Británico, el Metropolitan, el Hermitage y los museos vaticanos, uno de los mejores museos del mundo. Construido en 1793, significó la conversión de las colecciones privadas en museos públicos.

Característico por su pirámide de cristal a modo de entrada, en su interior alberga algunas de las obras artísticas más importantes de la historia, como La Gioconda de Da Vinci, La Venus de Milo, el Escriba Sentado de autor anónimo del Antiguo Egipto, el Código de Hammurabi, el lienzo de Las bodas de Caná de Veronese, la escultura de Psique reanimada por el beso del Amor de Antonio Canova, la Libertad guiando al pueblo de Delacroix, La consagración de Napoleón del pintor oficial del emperador, Jacques-Louis David, los Toros Alados de Mesopotamia, la Victoria de Samotracia, La balsa de Medusa de Géricault, y una sala destinada a 24 pinturas de gran formato de Rubens.

Para asegurar el acceso a la visita, pese al aforo, se recomienda comprar las entradas Louvre con antelación, desde su página web.

La Torre Eiffel

Atravesar los Campos Elíseos y llegar hasta su extremo occidental es un paseo digno de nuestro disfrute, y con ello, llegar a uno de los reclamos turísticos más famosos de la ciudad: la Torre Eiffel. Fue construida en 1889, por el arquitecto Gustave Eiffel, con hierro pudelado. La construcción de esta torre simbolizó la superioridad técnica y la capacidad de adaptarse a la construcción de nuevos materiales.

Consta de tres plantas, con ocho ascensores, para subir los 276 metros accesibles de los 300 metros que mide, y desde donde podrás disfrutar de una visión panorámica de la ciudad.

Al tratarse de uno de los destinos más turísticos de la ciudad, recomendamos comprar las entradas a la Torre Eiffel con antelación.

Versalles

Situada al Oeste de París, Versalles es una ciudad limítrofe que no puedes dejar de visitar si estás en la capital, y que cuenta con uno de los capítulos de la historia de Francia más importantes. Durante el reinado de Luis XIII, Versalles se configuró como un coto de caza y un pequeño pabellón de descanso para el rey y sus invitados. Fue tras la muerte de este, y con el posterior rey, Luis XIV, cuando dicho pequeño edificio comenzó a colmarse de riquezas, ampliarse y transformarse en una residencia real permanente, que junto a sus jardines, formó uno de los espacios más voluptuosos y ricos de la Europa del momento.

Entre las diferentes excentricidades de Luis XIV, se encuentra la construcción de la Galería de los Espejos, una sala de juego de luces con 357 espejos, que recubren gran parte de sus paredes, junto a pinturas y frescos en los techos, grandes lámparas y decoraciones de oro. Destacan también la Capilla Real, los Grandes Aposentos de los reyes, y los jardines, donde se encuentra la emblemática Fuente de los Caballos, que tiran del carro de Apolo.

Aunque si tienes tiempo y puedes disfrutar de una larga estancia en la ciudad, no puedes dejar de visitar el Arco del Triunfo, el Musée d’Órsay, la Sainte Chapelle, la Ópera Garnier, el Jardín de las Tullerías, Los Inválidos, la Plaza de la Concordia, el Campo de Marte, el Panteón de París, entre otros sitios de gran interés.