Podemos combatir el exceso de su utilización con estas cinco pautas que fija el experto:
- Uso controlado del móvil. Delimitando un tiempo para su uso durante la jornada. Dando ejemplo los padres a los hijos. Marcar su utilización al día,una hora como máximo durante la jornada.
- ‘Contrato’ entre las partes. Fijando unas reglas pactadas y escritasen la pareja para dialogar cara a cara, sin teléfono cerca, sobre todo los temas más conflictivos.
- El ‘policía’ del móvil. Apartar los móviles de la mesa en las comidascon "sanción" para quien transgreda la norma (invitar a una caña o un refresco a la familia).
- Zona ‘libre de móviles’. Establecer una franja horaria en el día ‘libre de móvile’ durante las reuniones sociales y de trabajo.
- La ‘ley del silencio’ de los móviles. Guardar en una caja todos los móviles silenciadosde las personas que se van a reunir por ocio o negocio y entregar a cada uno al finalizar la sesión.
“Ignorar a una persona por prestar atención al teléfono (phubbing) está azotando las relaciones personales. Y nos encontramos a tiempo de poder evitarlo”. Julio Garcia Gómez, experto en disfunciones de la comunicación social de la Fundación Casaverde.