El comisariado del proyecto está a cargo de dos figuras de enorme prestigio internacional, Sir Nicholas Penny, historiador de arte y exdirector de la National Gallery de Londres, y Cao Yiqiang, profesor de la China Academy of Art y uno de los críticos de arte más prestigiosos de China en la actualidad. Su entusiasmo y experiencia han sido clave para llevar a cabo este ambicioso proyecto.
La muestra contará con las mejores obras de tres generaciones de artistas de China y España, abarcando medio siglo desde la década de 1960 hasta el presente. Con un total de 100 obras de 100 artistas, la exposición presenta una rica variedad de estilos y temáticas, reflejando la diversidad cultural y artística de ambos países.
Entre los artistas participantes se encuentran los más destacados maestros de ambos países, como Quan Shangshi, Jin Shangyi, Zhan Jianjun, Antonio López García, Isabel Quintanilla o Julio Vaquero. La exposición cuenta con el respaldo de importantes figuras e instituciones del mundo del arte de China y España.
Coincidiendo con este hito temporal y encontrándonos hoy en día en un contexto de constante cambio tanto en del arte contemporáneo como en la situación global a todos los niveles, organizar esta exposición ofrece al público de ambos países la posibilidad de conocer la figuración contemporánea en su amplio y cada vez más poderoso recorrido a lo largo de este convulso último medio siglo.
Contexto del proyecto artístico
La figuración, y más concretamente la pintura realista, ha tenido siempre un lugar fundamental en el mundo del arte. Se vio cuestionada e incluso marginada por las élites artísticas con el auge de las vanguardias a principio del siglo XX y especialmente entrada la década de 1960, con la llegada del expresionismo abstracto norteamericano y el establecimiento oficial de nuevos cánones artísticos en el arte occidental. Fue en esta difícil situación cuando el arte realista, en particular la creación basada en la pintura al óleo, tuvo un espectacular desarrollo en China, convirtiéndose en la corriente principal de la creación y la educación artísticas y produciendo un gran número de obras que aún hoy se consideran la cumbre del género en este país.
Y fue durante este mismo periodo cuando algunos artistas españoles comenzaron a retomar la senda del realismo, con una visión y un enfoque muy particulares y propios del entorno en que vivían. Centraron su figuración en la realidad que les rodeaba y vistieron de modernidad ese mundo propio cuya cotidianeidad pasó a ser el centro de su universo creativo.
Así, en medio del impetuoso torrente del arte oficial, artistas chinos y españoles han mantenido con firmeza y renovado en profundidad el arte realista, que constituye en la actualidad un importante capítulo de la historia del arte mundial que merece atención y estudio detallado. Esta exposición es sin duda la primera muestra en espacio público español que aborda una mirada en profundidad al último medio siglo de este movimiento, incluyendo ambos países.
Históricamente, la tradición española, representada por Velázquez, Ribera y Goya, desempeñó un papel fundamental en el nacimiento, establecimiento y desarrollo del realismo occidental y configuró directamente la trayectoria de movimientos artísticos posteriores.
A partir de los años 60, mientras en países como Estados Unidos surgían movimientos como el fotorrealismo, artistas como Antonio López entre otros encabezaban un resurgimiento a la par que una renovación de la pintura realista en España, siendo su testigo recogido por posteriores generaciones da artistas hasta nuestros días.
Como señala Cao Yiqiang, mientras que la tradición de la pintura al óleo española cuenta con una amplia y formidable historia, su homóloga china es relativamente joven. La pintura al óleo en China no empezó a ser reconocida como disciplina profesional y académica hasta mediados del siglo XX. Recibió la influencia inicial del sistema francés y experimentó una importante transformación entre los años cincuenta y ochenta, debido en gran parte al poderoso impacto del realismo ruso.
Muchos de los artistas chinos que participan en esta exposición han recibido la influencia directa del célebre maestro ruso, Ilya Repin, uno de los más grandes maestros rusos del siglo XIX. Esta influencia configuró las características generales del arte chino durante ese periodo. Sin embargo, con la apertura de China en la década de los ochenta, los pintores al óleo chinos pudieron adoptar diversos enfoques procedentes de Europa y Estados Unidos. Las obras mostradas en esta exposición ilustran sus esfuerzos por absorber diversas influencias técnicas, con el fin último de desarrollar la pintura al óleo china como una forma de arte con una identidad china distintiva.
En palabras de Cao Yiqiang, el predominio de la modernidad, junto con la popularidad de los soportes actuales como la fotografía y la televisión, ha despertado un renovado interés por el arte figurativo y ha incitado a los artistas a revalorizar este enfoque.
En la década de los cincuenta, Antonio López y sus compañeros tomaron consciencia durante su estancia en Roma de un elemento propio de la pinntura española que se encontraba ausente en el arte renacentista italiano. Según López, este elemento estaba «muy cerca de la verdad, plenamente reflejado en los cuadros de Velázquez, Zurbarán, Ribera, Goya, etc. Quizá pueda ese mágico elemento ser descubierto por los asistentes a esta magnífica exposición.
Si (
No(
