Ante tal variedad, es normal que te surjan todo tipo de dudas y no sepas con qué seguro quedarte, ¿verdad? En ese caso, toma nota, porque a continuación te damos las claves que debes conocer para elegir el mejor seguro de coche para ti, que cubra todas tus necesidades, al mejor precio.
Conoce tus necesidades
Lo primero es ser consciente de cuáles son tus necesidades específicas en la carretera, ya que de ello dependerá enormemente el tipo de seguro que deberás contratar.
Por ejemplo, no será lo mismo si usas el coche a diario que de forma ocasional, los fines de semana o para ir al supermercado. Asimismo, también hay que tener en cuenta si realizas todos los días el mismo trayecto, por ciudad y de corta duración, que si utilizas el coche para hacer largos viajes por carretera. Además, como hemos comentado, la antigüedad del vehículo es otro factor muy a tener en cuenta.
Por otro lado, también debes valorar si prefieres pagar menos por adelantado con una cobertura básica, o si no te importa realizar una inversión más importante en una cobertura más amplia.
Responder a este tipo de preguntas te ayudará a encontrar el seguro que realmente necesitas, que cuente con las coberturas que resultan imprescindibles para ti.
Compara
Una vez tengas claras tus necesidades, te recomendamos utilizar un comparador de seguros como https://seguros-coche.arpem.com/, ya que de esta forma, además de ahorrar una gran cantidad de tiempo en la búsqueda, también podrás disfrutar de un importante ahorro económico, ya que el comparador te mostrará las diferentes opciones disponibles y los precios de cada una de ellas, para que puedas escoger la que te ofrezca una mejor relación calidad – precio.
A esto hay que sumarle que podrás realizar la comparativa desde cualquier lugar y a cualquier hora, sin necesidad de desplazarte, cómodamente desde tu ordenador o teléfono móvil, en el momento que mejor te venga.
Además, para ponértelo aún más fácil, en Arpem han realizado una selección con los mejores seguros de coche (https://www.arpem.com/seguros-coche/estudios/mejores-seguros-de-coche-del-mes/), en la que, tras analizar los factores más importantes a la hora de elegir un seguro, han escogido aquellos más destacados y recomendables para la mayoría de conductores.
Coberturas y restricciones
Al contratar un seguro de coche, debes asegurarte la máxima seguridad en caso de sufrir cualquier incidente en la carretera, para así ganar en tranquilidad y, además, proteger tu inversión.
Por esta razón, antes de contratar, debes analizar detenidamente las coberturas que ofrece cada aseguradora ante distintos tipos de circunstancias, como, por ejemplo, si existe un límite máximo de cobertura en función del siniestro.
Por otro lado, también debes tener en cuenta que cada póliza incluye una lista de restricciones y exclusiones ante situaciones concretas, las cuales deberán estar establecidas en el contrato. De ahí la importancia de leer bien la letra pequeña.
Nuestra recomendación es contratar un seguro que ofrezca un buen equilibrio entre coberturas y limitaciones, para así asegurarte de desechar las que ofrezcan menores coberturas o más restricciones.
Personalización de la póliza
Cada conductor tiene sus propias necesidades, por ello, es importante que el seguro de coche pueda personalizarse lo máximo posible, e incluso, a poder ser, que se realice a medida.
Para ello, hay que elegir pólizas flexibles, ajustables y totalmente personalizables en función del tipo de coche, la experiencia del conductor o el uso que se haga. Las pólizas más demandadas y mejor valoradas por los usuarios son las que ofrecen mayores posibilidades de personalización.
Nuestro consejo es que te asegures de que tanto las coberturas como la prima se ajuste a tus necesidades particulares como conductor, prestando atención a aquellas pólizas que ofrezcan coberturas específicas, promociones por contratación y servicios adaptados.
Como ves, son muchos los aspectos a tener en cuenta para elegir un seguro de coche de calidad y a buen precio que te permita estar protegido en cada trayecto que realices, sin necesidad de realizar un desembolso excesivo.