¿Qué es el hormigón impreso?
El hormigón impreso es un material de construcción compuesto por diferentes elementos: aglomerante, añadidos como arena o gravilla, agua y otros aditivos.
Los pavimentos hormigón impreso se caracterizan por ser maleables, adherentes y muy duraderos, lo que hace que sean una de las mejores alternativas para exteriores, superando las prestaciones de otros materiales habituales como la madera, el terrazo o la cerámica, que son más limitados.
Para la fabricación del hormigón impreso se utiliza un mortero endurecedor de forma continua sobre el hormigón fresco.
¿Cuándo utilizar el hormigón impreso?
Si nos fijamos en el hormigón impreso Galistar, comprobamos que es un material de construcción muy innovador destinado y muy apto para pavimentar múltiples superficies pigmentadas y de bajo relieve, ya que al fabricarse con mortero directamente sobre la superficie y con el hormigón todavía fresco, permite fabricar todo tipo de piezas y texturas, consiguiendo excelentes resultados.
Es perfecto para el exterior, ya que el hormigón impreso puede simular el estampado de otros materiales como la piedra, la baldosa, la pizarra o los adoquines, entre muchos otros, con la ventaja de que ofrecen una resistencia superior y un acabado más agradable.
Esto hace que el hormigón impreso sea uno de los materiales más utilizados en el sector de la pavimentación, hasta el punto de que también es conocido como pavimento impreso.
El primer uso del hormigón impreso fue en Estados Unidos hace 50 años, mientras que en España se usa desde hace aproximadamente 30 años, y cada día que pasa, su uso es mayor, gracias entre otras cosas a los avances de la tecnología, que han hecho que el hormigón armado haya mejorado enormemente en los últimos años.
¿Qué es el hormigón pulido?
Por otro lado está el hormigón pulido, similar al impreso, pero con un acabado y un proceso de elaboración diferente.
El hormigón pulido consiste en un microcemento con polvo acrílico, cuya superficie está totalmente libre de marcas, el cual se elabora mediante un proceso de pulido directamente sobre la superficie.
Altamente resistente, el acabado del hormigón pulido es mucho más liso y brillante, consiguiendo una gran estética y un excelente rendimiento.
¿Cuándo utilizar el hormigón pulido?
Por sus cualidades, el hormigón pulido es altamente recomendable como pavimento industrial, ya que soportará a la perfección los elevados pesos de las maquinarias, ya que es muy fuerte y resistente.
Aunque puede variar, por lo general, el hormigón pulido precio es de entre 15 y 20 euros el metro cuadrado, lo que hace que sea un material muy resistente a los impactos y duradero, con un precio altamente competitivo, lo que ha hecho que sea uno de los pavimentos más utilizados a día de hoy, destacando por su excelente relación calidad–precio.
En definitiva, aunque ambos pavimentos están hechos con hormigón, el proceso de construcción es diferente y también el acabado, lo que hace que el hormigón impreso sea muy utilizado para zonas exteriores, como jardines o terrazas, mientras que el hormigón pulido se usa principalmente en suelos de naves industriales, garajes, almacenes, entre otros, ya que al ser totalmente liso ofrece un mayor rendimiento.