El euro ha ganado posiciones frente al dólar en las últimas cuatro sesiones de negociación, ubicándose esta mañana en máximos no vistos desde febrero. El movimiento se alinea con el alza de los rendimientos del bono alemán a 10 años, que cotiza en sus mayores niveles desde mayo de 2019. Desde el ámbito regional, el continuo flujo de noticias sobre las perspectivas de reapertura y el rápido avance de las vacunaciones soportan al euro. El gobierno de Italia aprobó ayer el retraso en una hora del toque de queda a las 11pm e indicó que la medida será retrasada otra hora a partir del 7 de junio y totalmente eliminada a partir del 21 de junio. En Italia, el recuento diario de casos y las hospitalizaciones han disminuido considerablemente en las últimas semanas, lo que es un buen augurio para el regreso a la vida normal en el futuro cercano. El calendario económico de hoy incluye el PIB del primer trimestre de la zona euro y las cifras de empleo. Una contracción mayor de lo esperado puede ejercer presión a la baja sobre el euro, aunque no debería iniciar una nueva tendencia bajista ya que los datos rezagados no deberían revertir el actual tono de optimismo.
El billete verde operó con un tono mixto en la sesión de ayer, balanceando el impacto de temores inflacionarios con el optimismo por los planes de reapertura en algunas economías avanzadas. En Nueva York, la obligatoriedad del uso de mascarillas será levantada a partir de mañana para personas completamente vacunadas, que ya el estado ha vacunado a la mitad de su población. En Nueva Jersey, todos los colegios deberán retornar a las clases presenciales a partir de septiembre. Este panorama contrasta fuertemente con la narrativa en economías emergentes, donde el virus continúa expandiéndose rápidamente y pone en riesgo los planes de reapertura a nivel global. EE.UU. enviará unos 20 millones de dosis de vacunas a otros países, en un intento por colaborar con las campañas de vacunación foráneas después de que el país ya ha vacunado a más del 40% de la población. En el calendario de hoy se publican los datos de crecimiento del mercado inmobiliario, un reporte que los inversores estarán observando en busca de señales inflacionarias en el sector. El jefe de la Fed de Dallas, Robert Kaplan, se presenta hoy a las cámaras.
La libra esterlina se coloca esta mañana cerca de sus niveles máximos desde febrero, con rumbo a rebasar una resistencia que la ubicaría en máximos de tres años. La moneda ha operado con optimismo sobre la nueva fase de reapertura iniciada ayer, que permite a los británicos reunirse sin restricciones y cenar en espacios cerrados. La libra ha mantenido este ímpetu alcista a pesar de que Downing Street se mantiene dubitativo sobre la etapa final de reapertura prevista para el 21 de junio, debido a la rápida expansión de la cepa india del virus en el país. Esta mutación del virus, que parece tener un mayor ritmo de contagio que la variante sudafricana, ha duplicado el número de pacientes en apenas una semana. Mientras tanto, los inversores observan con atención la evolución del calendario económico y la reacción de la economía tras el alivio de las medidas sanitarias. Esta mañana, el reporte de la OIT marcó una caída marginal de la tasa de desempleo, de 4,9% a 4,8% durante el trimestre móvil. La recuperación fue impulsada por un aumento del 1,2% en los puestos a tiempo completo, mientras que el empleo a tiempo parcial cayó un 2,0%. Los datos del mercado laboral aún no son los más representativos debido al impacto del esquema de licencias; sin embargo, hay señales iniciales de que el empleo comienza a recuperarse a medida que la economía se reabre. Hoy, el gobernador Andrew Bailey y otros miembros del Banco de Inglaterra hablarán hoy. Aunque es poco probable que el evento brinde información relevante para los mercados de divisas, la libra observa un nivel psicológico clave.
El peso mexicano cerró su tercera jornada consecutiva con ganancias frente al dólar, y esta mañana opera nuevamente en positivo. Sin muchos eventos destacados en el ámbito doméstico, la narrativa del peso se concentra en el entorno de riesgos a nivel global y el apetito de los inversores por activos de riesgo. La pausa de Banxico del ciclo expansivo de la política monetaria es un factor subyacente muy favorable para el peso, pues incrementa su atractivo de carry trade de cara a los inversores. En un contexto de bajas tasas de interés en las economías avanzadas, el crecimiento de los rendimientos reales será el factor dominante para las monedas emergentes ya que los mercados se lanzan hacia activos con mayores retornos relativos. Hoy se dan a conocer las cifras de las reservas internacionales esta mañana, que se encuentran cerca de sus máximos históricos tras un rápido crecimiento durante la pandemia.