Siendo éstas sus principales finalidades, habrá que permanecer atentos al texto final de la reforma, que se espera para mediados de año y, posteriormente, el impacto real que estas medidas puedan tener en la solución de la situación de las empresas en dificultades.
Por otro lado, otro de los sucesos que sin duda marcará este 2022 es el final de los 2 años de carencias de la financiación ICO – Covid, previsto para a partir del segundo semestre del año. El tener que comenzar a hacer frente a esta financiación, pensada en su momento para ayudar a las empresas impactadas por la pandemia, podrá suponer nuevas tensiones de tesorería para muchas de dichas compañías.
Manuel Gordillo, socio de Abencys advierte que “es fundamental que las empresas anticipen el efecto que el fin de la carencia de los Créditos ICO vaya a generar en su tesorería, para poder tomar las medidas de protección más adecuadas, como acudir a los acuerdos de refinanciación, al pre-concurso o al concurso de acreedores”.
Asimismo, siguiendo con las medidas pensadas para paliar los efectos de la pandemia en el ámbito empresarial, el próximo 30 de junio está programado el fin de la moratoria concursal. Mediante esta medida, desde que se declarase el estado de alarma en marzo de 2020 las empresas insolventes han estado dispensadas de presentar concurso de acreedores a pesar de estar obligadas a ello. Con el fin de la moratoria, y la no recuperación plena de la economía, se prevé que sean muchas las compañías que acudan al concurso, muchas de ellas las consideradas empresas zombis, esto es, compañías inviables que han mantenido su actividad de forma artificial a causa de las medidas públicas de apoyo, causando una asignación ineficiente de recursos. Ante esta situación, desde el despacho Abencys, sigue firme en su postura: “lo que en principio fue una medida lógica y adoptada en la mayoría de los países de nuestro entorno, con el paso del tiempo, las sucesivas prórrogas y la no exigencia de ningún requisito para poder acogerse a éstas, se ha convertido en una medida con unos efectos contraproducentes para el futuro del tejido productivo español”.
2022: Un año de cambios.
En definitiva, desde el despacho Abencys se pronostica que este 2022 puede ser un año de nuevas oportunidades de recuperación, sin embargo, a causa del fin de las medidas comentadas previamente, podría acarrear consecuencias negativas para aquellos negocios en dificultades.
“2022 será sin duda un punto de inflexión en la evolución de la pandemia y de los efectos económicos derivados de la misma. Y para los negocios en dificultades la anticipación continuará siendo la mejor herramienta para poder alcanzar soluciones duraderas que permitan el mantenimiento de la actividad” apunta Manuel Gordillo, socio de la firma.