Con la ayuda de los últimos comunicados de los bancos centrales, la moneda única amortiguó razonablemente bien la fuerza del dólar durante la primera parte de la sesión europea de ayer, mientras que registró ligeras ganancias en el día, ya que el dólar estadounidense retrocedió con los rendimientos del Tesoro. Esta mañana, la moneda única vuelve a cotizar a la baja junto con el amplio espacio del G10. Los datos de la producción industrial alemana del mes de abril no fueron motivo suficiente para que los operadores del euro se enfrentaran a la fortaleza del dólar, ya que los datos se situaron 0,5 puntos porcentuales por debajo de las expectativas, en un 0,7 % intermensual. Los datos de la producción industrial no hacen más que deteriorarse, ya que la potencia productiva europea se adentra en el segundo semestre. Con sólo la lectura final de los datos del PIB del primer trimestre, el euro queda hoy a merced de las fuerzas del mercado en general. Sin embargo, es probable que los movimientos del EURUSD sean más limitados que los de otros pares de divisas del G10, ya que los operadores se posicionan para la esperada reunión del BCE de mañana.
Los mercados se centraron en el contexto de crecimiento más sólido de Estados Unidos para revalorizar las expectativas más halagüeñas de la Reserva Federal a principios de esta semana. La subida de los rendimientos en Estados Unidos presionó a la renta variable y a las divisas sensibles al riesgo. Sin embargo, las micro noticias de la sesión de ayer, concretamente las de Target, que recortó su beneficio operativo para el segundo trimestre por segunda vez en tres semanas debido a los elevados inventarios, pusieron de manifiesto que el panorama de la demanda de los consumidores no está tan claro en EE. UU. como parecían sugerir los datos recientes. En el transcurso del día, los rendimientos estadounidenses comenzaron a moderarse a medida que la preocupación por el crecimiento volvía a aparecer en la mente de los operadores de renta fija, y el 10 años estadounidense volvió a caer por debajo del 3 %.
En nuestras previsiones de junio sobre el mercado de divisas, destacamos que esta alternancia entre la valoración de una política monetaria más agresiva por parte de la Reserva Federal y la consideración de mayores riesgos de crecimiento iba a persistir este mes, induciendo una elevada volatilidad intradía. Mientras que los rendimientos comienzan la sesión al alza y los futuros de las acciones apuntan a la baja una vez más, es posible que hoy se produzca un cambio de rumbo en la apertura del mercado estadounidense. Con los limitados datos económicos de Estados Unidos antes de los datos del IPC del viernes, el dólar en general seguirá siendo dictado por los movimientos de los activos cruzados.
Después de una serie de malos datos sobre el gasto de los consumidores ayer por la mañana, la libra rápidamente revirtió el rumbo para recuperar una gran parte de las pérdidas anteriores ya que el índice preliminar de servicios de mayo, que mostró la cuarta mayor caída en un mes en el índice registrado, se revisó 1,3 puntos al alza, hasta 53,1, en la lectura final. Más importante para los mercados que la revisión al alza de la cifra principal fue la mejora del entorno del empleo. El comunicado de prensa señala que la creación de empleo se redujo ligeramente en mayo, ya que las empresas trataron de reducir costes al no sustituir las bajas voluntarias. Sin embargo, en el informe final se considera que el ritmo de creación de empleo no ha variado con respecto a abril, ya que muchas empresas están intentando reconstruir su capacidad. La mejora del mercado laboral ofrecerá al Banco de Inglaterra algunas garantías de que el nivel actual de la política no es demasiado restrictivo y podría endurecerse aún más si se considera de forma aislada. El descenso de los rendimientos en EE. UU. hacia el final de la sesión de la tarde en Europa amplió la recuperación de la libra, dejando el GBPUSD un 0,45 % más alto en la jornada.
Esta mañana, la libra reanuda sus operaciones a contrarreloj mientras los rendimientos de EE. UU. comienzan la mañana tratando de subir aún más. Los acontecimientos en Westminster tampoco ayudan a las perspectivas de la libra esterlina, ya que personas familiarizadas con el asunto afirman que Boris Johnson impulsará la legislación para anular partes del acuerdo del Brexit, una medida que podría influir en las tensiones con la UE y desencadenar restricciones comerciales en un entorno ya de bajo crecimiento y alta inflación.