La multinacional tecnológica GMV ha cerrado con la corporación Lockheed Martin un acuerdo crucial para la industria espacial española que impactará positivamente en el tejido económico y laboral del país. El acuerdo implica el desarrollo de los centros de procesado y control del sistema SouthPAN (Southern Positioning Augmentation Network), una iniciativa conjunta de los gobiernos de Australia y Nueva Zelanda para proporcionar en ambos países servicios de navegación y posicionamiento preciso por satélite, conocidos como Satellite Based Augmentation System y Precise Point Positioning, (SBAS y PPP respectivamente por sus siglas en inglés). GMV será, además, responsable de monitorizar y asegurar el cumplimiento de las prestaciones de ambos servicios en la región. El acuerdo, cuya cuantía asciende a 180 millones de euros, supone el mayor contrato individual jamás alcanzado por la industria espacial española fuera de la Unión Europea. El sistema SouthPAN será crucial para el futuro de la región de Australasia, donde ayudará a impulsar la innovación y a crear valor para empresas y consumidores, que se beneficiarán de esta tecnología en un amplio abanico de sectores como pueden ser la aviación, agricultura, construcción, minería, industria marítima, ferroviaria, espacial y servicios públicos, entre otros. Con el desarrollo de SouthPAN, Australia y Nueva Zelanda se suman a la lista de países y regiones que ya disponen de servicios SBAS propios, como son EE.UU. (WAAS), Europa (EGNOS), India (GAGAN) y Japón (MSAS), contribuyendo así a mejorar la cobertura e interoperabilidad de estos servicios a nivel mundial.
Este contrato supone, asimismo, todo un ejemplo del retorno a nuestro país de la contribución de España a la Agencia Espacial Europea (ESA), gracias a la capacitación adquirida por compañías como GMV en contratos para la ESA. España es actualmente el cuarto país de la Unión Europea en contribución a ESA, con un coeficiente de retorno en contratos para empresas españolas del 106% en los últimos años, lo que supone un superávit para España de 74 millones de euros.
En opinión de Jesús Serrano, director general de GMV, «este contrato servirá para reforzar la posición determinante de GMV en el sector espacial y su contribución global en navegación por satélite. Además, el hecho de generar puestos de trabajo de muy alta cualificación afianza la posición de España como actor clave para la industria espacial a nivel mundial, y consolida a GMV como el mayor empleador del sector espacio en España y quinto en la Unión Europea».
El desarrollo, puesta en servicio y operaciones de SouthPAN está siendo supervisado por Geoscience Australia, la agencia geográfica del gobierno australiano, en colaboración con Toitū Te Whenua Land Information New Zealand, su equivalente en Nueva Zelanda. Ambas agencias suscribieron un Acuerdo de Cooperación de Ciencia, Investigación e Innovación (ANZSRICA, por sus siglas en inglés) en 2020. El Gobierno de Australia contribuirá al desarrollo de SouthPAN con 1.400 millones de dólares australianos durante los próximos 20 años.
El pasado 26 de septiembre, tan solo dos semanas después de la firma del contrato, se activó la transmisión de las primeras señales del sistema, comenzándose así a proporcionar los primeros servicios. Se trata de un hito muy relevante, debido a que SouthPAN es el primer caso en que un consorcio industrial proporciona un sistema SBAS como servicio en lugar de como sistema llave en mano.
GMV será responsable del desarrollo de dos subsistemas clave de SouthPAN: el centro de procesado (Corrections Processing Facility, CPF) y el centro terreno de control (Ground Control Centre, GCC). Además, la compañía se encargará de monitorizar y asegurar el cumplimiento de las prestaciones del sistema en la región y proporcionará soporte a la operación y mantenimiento del mismo. El centro de procesado es el responsable de generar mensajes de corrección a las señales transmitidas por los satélites GPS y Galileo, permitiendo mejorar la precisión del posicionamiento de los usuarios de solo 10 cm de error. Asimismo, el CPF se encarga también de detectar fallos en los satélites y de generar avisos a los usuarios, permitiendo así que aeronaves civiles utilicen SouthPAN como sistema de navegación en distintas operaciones de vuelo, incluyendo maniobras de aproximación de precisión a las pistas de aterrizaje. Estos servicios de seguridad estarán disponibles en 2028. Por su parte, el centro de control, operado 24 horas al día los 7 días de la semana, proporcionará todas las funciones necesarias para monitorizar y controlar el sistema y ofrecerá información a las comunidades de usuarios sobre el funcionamiento del sistema y la disponibilidad de sus servicios.
La ministra australiana de Recursos y Australia del Norte, la diputada Madeleine King, declaró en un comunicado de prensa el pasado 16 de septiembre que SouthPAN representa un importante compromiso entre los gobiernos de Australia y Nueva Zelanda a la hora de proporcionar servicios esenciales de posicionamiento por satélite en la región de Australasia.
«SouthPAN proporcionará un posicionamiento instantáneo, preciso y fiable a los usuarios de todas las zonas terrestres y marítimas de Australia y Nueva Zelanda sin necesidad de una señal de teléfono móvil o de Internet», explicó la ministra King. «Ya hemos demostrado que la industria y la comunidad podrán utilizar SouthPAN para desarrollar aplicaciones innovadoras que mejoren la seguridad y la productividad y que impulsen la innovación en el sector industrial».
Por su parte, el ministro de Información Territorial de Nueva Zelanda, Damien O’Connor, describió la iniciativa conjunta entre Australia y Nueva Zelanda como un acuerdo que cambiará las reglas del juego en las economías de ambas naciones, indicando que SouthPAN proporciona una infraestructura digital crucial para el futuro cuyos beneficios reales se espera aumenten a lo largo de la vida del proyecto. El ministro señaló, además, que en un futuro nuevos productos del mercado emplearán la infraestructura de SouthPAN para crear valor en empresas y consumidores.