Los tóxicos pueden afectar la piel y contribuir a la aparición de la celulitis de varias maneras. Por ejemplo, los tóxicos pueden interferir con el sistema linfático, lo que puede provocar la acumulación de líquidos y toxinas en el cuerpo. Esto a su vez puede causar inflamación y debilitar la estructura de la piel, lo que aumenta la probabilidad de que se formen hoyuelos y protuberancias.
"Para tratar bien la celulitis y la retención de líquidos, sabemos que primero debemos ir al origen. Los tóxicos se acumulan en el cuerpo de dos maneras: o bien, disolviéndose en líquido, por lo que retenemos para que el organismo se defienda; o atrapados en la grasa. En cualquiera de estas dos situaciones, se puede observar cómo las piernas y abdomen se inflaman, se tiene una sensación de pesadez y cuesta bajar de peso", explica María Pérez de Villaamil, directora del Centro Mem.
Los protocolos que se hacen en CentroMem, empiezan tratando esta acumulación a través de la desintoxicación. En primer lugar, se comienza con un diagnóstico muy completo en el que se valora el estilo de vida y la alimentación del paciente. Esto nos va a ayudar a ver cuántas sesiones Be Detox va a necesitar.
Posteriormente, se pasa a trabajar las zonas dónde se haya acumulado más la grasa alternando varias tecnologías: la radiofrecuencia, la vacumterapia, la electroestimulación muscular, la crioterapia, el ultrasonido focalizado y la luz led. Con estas técnicas se trata el volumen, el aspecto de la piel, la reducción de la celulitis y la definición en las partes del cuerpo que lo necesiten.
Además, se trabaja manualmente con masajes adecuados a cada proceso del tratamiento. Y se acompaña de una rutina de cosmética para casa y, si lo desean, con un plan de Nutricoachpersonalizado.
Estos protocolos van totalmente personalizados, y gracias a ellos se consigue reducir la grasa localizada y reafirmar la piel, logrando así una figura más esculpida y tonificada. Además, este tratamiento ayuda a mejorar la circulación sanguínea y la retención de líquidos, lo que resulta en una piel más suave y sin celulitis.
Además, se trata de un protocolo seguro, indoloro y no invasivo, lo que lo convierte en una excelente opción para aquellas personas que desean mejorar su figura sin tener que someterse a procedimientos quirúrgicos. Además, se adapta a todo tipo de piel y puede ser utilizado en diversas áreas del cuerpo, como abdomen, glúteos, piernas y brazos.
El tratamiento consta de varias sesiones a realizar en un tiempo aproximado de tres meses y, para ello, el CentroMem ofrece un bono de 1.000 ?.