En el contexto actual, contar con avales puede ser algo inasumible para muchas personas, y eso no necesariamente tiene que ser causa de no contar con oportunidades de financiación. Por falta de capital, por no poder ahorrar, por estar en paro, etcétera. Son muchas las situaciones en las que no se cuenta con un aval para afrontar la solicitud de cualquier instrumento financiero. Sin embargo, en la actualidad son cada vez más las empresas que ofrecen
préstamos sin aval y que tienen condiciones que, para la naturaleza de este tipo de financiación, son muy saludables y que pueden ser asumidas por la mayoría de las personas.
¿Qué ventajas ofrecen?
- No necesitar aval: desde luego, la ventaja más obvia es que no necesitan de ningún tipo de aval o garantía para su solicitud. Por esa razón, suelen ser un excelente instrumento financiero para situaciones en las que estrictamente se requieran.
- Rápida aprobación: suelen pedir muchos datos personales, y poco más. Se aprueban en menos de 48 horas en empresas especializadas del sector, sobre todo porque los importes que se aprueban y las fechas para la devolución no suelen ser tan altos ni tan extensos, respectivamente.
- Seguridad: hay empresas que incluso ofrecen la posibilidad de hacer la solicitud desde internet, que operan legalmente en España y que ofrecen condiciones ventajosas y de acuerdo a la ley. Por ende, puede solicitarse un préstamo sin aval con totales garantías y confianza.
Recomendaciones para solicitar préstamos sin aval
A estas alturas, muchas personas reconocen que tener a la mano un instrumento de financiación puede representar una ayuda imprescindible en muchos casos. No obstante, es importante también destacar que todos los instrumentos financieros tienen su utilidad, pero también sus riesgos y sus puntos negativos.
Por esa razón, las siguientes recomendaciones pueden servir de ayuda para quienes tengan dudas acerca de si solicitar o no un préstamo sin aval, o, por el contrario, para saber cómo utilizarlo de la mejor manera una vez se ha recibido el dinero producto de una solicitud aprobada:
- ¿Cuánto y para qué? Es evidente que ante la posibilidad surge la necesidad. Pero no debería ser así. Lo ideal es que antes de buscar un préstamo sin aval, ya se tenga una idea clara de para qué se necesita -si realmente se necesita- y cuánto sería el importe ideal. Pedir de más, pedir sin necesitar, es una deuda innecesaria que solo traería más problemas.
- Solo empresas confiables: así como hay empresas que operan en internet que son seguras, que están debidamente autorizadas para operar en España, hay una gran cantidad de sitios web que ofrecen préstamos con condiciones absurdas, increíbles, y que por ende representan más un riesgo que un beneficio para las personas. Lo mejor es optar a lo seguro, ya que por intentar tener una tasa de interés muy baja o importes mayores, los problemas legales y financieros a futuro pudieran ser irrecuperables.
- Devoluciones: las empresas de préstamos rápidos, de préstamos sin aval, no se diferencian mucho de los bancos en su forma de tratar el historial crediticio de sus usuarios. Por eso, lo mejor es mantener un perfil saludable de endeudamiento, con devoluciones de los importes en el tiempo requerido, o mucho antes, y solicitando solo cuando hay necesidad y no sencillamente porque hay préstamos disponibles. Un bajo nivel de endeudamiento es un aliciente importante para mejores tasas de interés e importes más altos por parte de estas entidades.
Lo ideal es utilizar los préstamos sin aval para salir de algún apuro, siempre y cuando no sea salir de otra deuda mayor. Los préstamos, como cualquier otro instrumento financiero, es una ayuda, pero también una gran responsabilidad. Por esa razón, siempre se deben tratar con el equilibrio adecuado, para que el buen uso siempre prime por encima de cualquier cosa.