Uzbekistán, al igual que otros países de Asia Central, corre un alto riesgo por el cambio climático, que amenaza su desarrollo económico y social, así como la seguridad y el bienestar de su población. El país depende de los recursos hídricos procedentes de los glaciares de montaña, que están sometidos a un intenso deshielo. Además, Uzbekistán se enfrenta a problemas de desertificación, erosión del suelo, degradación de bosques y pastos, así como a una economía muy intensiva en energía y una baja proporción de fuentes de energía renovables. Uzbekistán concede especial importancia a la aplicación de medidas y acciones nacionales de lucha contra el cambio climático, así como a la cooperación con socios internacionales en este ámbito.
Uzbekistán es parte de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) y del Acuerdo de París, que son los principales instrumentos internacionales en este ámbito.
La Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) es un acuerdo internacional firmado por más de 180 países con el objetivo de cooperar para abordar el problema del calentamiento global y sus consecuencias negativas para la naturaleza y la humanidad. Desde su adhesión a la CMNUCC el 20 de junio de 1993, Uzbekistán participa activamente en los esfuerzos multilaterales para frenar el cambio climático y adaptarse a él.
En 2017, Uzbekistán firmó el Acuerdo de París, que es un complemento de la CMNUCC y establece el objetivo general de limitar el aumento de la temperatura media mundial por debajo de 2 °C en comparación con los niveles preindustriales. Como parte del Acuerdo de París, Uzbekistán se ha comprometido a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 35% para 2030 con respecto a la base de referencia de 2010.
Para alcanzar este objetivo, Uzbekistán está llevando a cabo una serie de proyectos y programas destinados a mejorar la eficiencia energética, desarrollar fuentes de energía renovables, proteger los bosques y la biodiversidad, mejorar la gestión del agua, adaptar la agricultura al cambio climático y aumentar la concienciación y participación de la población en este proceso.
Uzbekistán también participa regularmente en las Conferencias de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP), que es el órgano decisorio supremo para seguir desarrollando y aplicando la Convención y el Acuerdo de París.
En la 26ª Conferencia de las Partes, que tuvo lugar en Glasgow (Reino Unido) en noviembre de 2021, Uzbekistán apoyó la Declaración conjunta sobre bosques y uso de la tierra adoptada, y expresó su disposición a seguir cooperando con la comunidad internacional para promover la agenda verde y frenar los procesos de cambio climático.
Como parte de la aplicación de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, Uzbekistán está realizando importantes esfuerzos para cumplir sus obligaciones de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y adaptarse al cambio climático, y está llevando a cabo una política integral de cambio climático que incluye las siguientes áreas:
- Mejora de la eficiencia energética y desarrollo de fuentes de energía renovables.
Uzbekistán pretende reducir la intensidad energética de su PIB en un 50% para 2030 en comparación con 2010, así como acelerar el desarrollo de las fuentes de energía renovables y aumentar su cuota en la generación de electricidad del 5% al 30% en los próximos 7 años. Para ello, Uzbekistán está llevando a cabo una serie de proyectos de modernización de centrales térmicas e hidroeléctricas, introducción de tecnologías y equipos de ahorro energético, desarrollo de las energías solar, eólica y de la biomasa, y sensibilización y cualificación de los especialistas y la población en este ámbito.
Sólo este año, Uzbekistán tiene previsto poner en servicio fuentes de energía renovables con una capacidad total de 4.300 megavatios.
- Protección y restauración de los bosques y la biodiversidad.
Uzbekistán reconoce la importancia de los bosques y la biodiversidad para la mitigación del cambio climático y la adaptación al mismo, así como para garantizar el equilibrio ecológico, la seguridad alimentaria, la salud y el bienestar de la población. Uzbekistán está llevando a cabo un programa de reverdecimiento a gran escala para plantar más de 2.000 millones de árboles antes de 2030 y para establecer y reforzar el sistema nacional de áreas naturales especialmente protegidas, que debería cubrir el 10% de la superficie del país antes de 2030.
- Mejora de la gestión de los recursos hídricos y adaptación de la agricultura al cambio climático.
Uzbekistán se enfrenta a tareas complejas para garantizar la seguridad hídrica y la independencia alimentaria en condiciones de recursos hídricos limitados e inestables, así como para reducir el impacto de la agricultura en el medio ambiente. El país está tomando medidas para el uso racional y la protección de los recursos hídricos, como la rehabilitación de las infraestructuras de regadío, la introducción de tecnologías de ahorro de agua, el refuerzo de la cooperación internacional en materia de flujos hídricos transfronterizos y la adaptación de la agricultura al cambio climático.
En concreto, la Estrategia para el Desarrollo del Nuevo Uzbekistán para 2022-2026 establece los objetivos de ahorrar al menos siete mil millones de metros cúbicos de agua mediante el uso eficiente de los recursos hídricos; reducir el consumo de electricidad en las instalaciones hídricas; e introducir un sistema de gestión de las instalaciones hídricas basado en la colaboración público-privada.
- Aumentar la resiliencia y la adaptación al cambio climático en otros sectores.
Las actividades relacionadas con las medidas de mitigación y adaptación a los impactos del cambio climático se reflejan en casi todas las estrategias sectoriales, planes y programas de desarrollo del país. En particular, en la Estrategia de Gestión de Residuos Sólidos Urbanos para 2019-2028, la Estrategia de Desarrollo Agrícola para 2020-2030, el Concepto de Protección del Medio Ambiente hasta 2030, el Concepto de Suministro de Electricidad para 2020-2030, etc., y en la Estrategia de Desarrollo de la Agricultura para 2020-2030.
El país está aplicando con éxito medidas de adaptación y mitigación del cambio climático, incluidos 15 proyectos del Mecanismo de Desarrollo Limpio del Protocolo de Kioto. Durante todo el periodo de vigencia de estos proyectos, Uzbekistán ha puesto en circulación 15,3 mil toneladas de reducciones certificadas de emisiones y ha atraído inversiones privadas extranjeras por valor de 24,4 millones de dólares.
Según un informe del Banco Mundial, en 2030 al menos 8 millones de personas vivirán en regiones con alto riesgo de catástrofes climáticas. Según los expertos, para aplicar con éxito los programas destinados a mitigar los efectos negativos del cambio climático se necesitan grandes inversiones. El importe total de dicha financiación puede rondar los 60.000 millones de dólares.
Uzbekistán participa activamente en los esfuerzos multilaterales para contrarrestar los desafíos medioambientales mundiales. En particular, el discurso pronunciado por el Presidente de Uzbekistán, Shavkat Mirziyoyev, el 19 de septiembre de 2023 en la 78ª sesión de la Asamblea General de la ONU demostró una vez más que la república está interesada en prevenir los desastres medioambientales y adaptarse a las consecuencias del cambio climático. En particular, se señaló que, en el contexto de la creciente crisis mundial provocada por el calentamiento global, Asia Central, que sigue luchando contra la tragedia del mar de Aral, se está convirtiendo en una de las regiones más vulnerables a las catástrofes naturales.
La 21ª reunión del Comité de Examen de la Aplicación de la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación se celebró en Samarcanda del 13 al 17 de noviembre de 2023 con la participación de unos 500 delegados de 196 países y de la Unión Europea, representantes de la sociedad civil y del mundo académico.
El año que viene se celebrará aquí el Foro Internacional sobre el Clima, en el que se debatirá un proyecto de resolución de la Asamblea General de la ONU para apoyar los esfuerzos de los países de Asia Central en la lucha contra las amenazas climáticas.
Además, la delegación de la República de Uzbekistán participará en la Cumbre Mundial sobre la Lucha contra el Cambio Climático en el marco de la 28ª Conferencia de las Partes en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, que se celebrará los días 1 y 2 de diciembre de este año en Dubai. Según los expertos, este foro contribuirá a aunar los esfuerzos de la comunidad internacional en la lucha contra el cambio climático y la mitigación de sus consecuencias, así como en la transición a la energía verde.
En este contexto, con el telón de fondo de la actualización de la agenda climática internacional, la interacción activa entre Uzbekistán y las Naciones Unidas en el ámbito del cambio climático, así como la política a largo plazo aplicada por Uzbekistán en el ámbito de la protección del medio ambiente y el mantenimiento del equilibrio ecológico dan fe del reconocimiento por parte del país de la necesidad urgente de abordar los problemas medioambientales.
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