El Ministerio de Relaciones Exteriores ha indicado en un comunicado de prensa que el "goce de buena salud es un derecho de toda la humanidad y también un valor universal estipulado claramente en la Constitución de la OMS, independientemente de la diferencia de raza, religión, creencia política o condiciones económicas y sociales".
El ministerio exhorta a la OMS a no ignorar la contribución de Taiwán a la seguridad de la salud pública global y a los derechos humanos relacionados con la salud, así como sus esfuerzos por combatir las enfermedades, y pide a la organización que sea más inclusiva y que acepte la participación de Taiwán con el fin de crear una situación en la que todos ganen.
Pese a su exclusión, Taiwán no descarta todavía la posibilidad de participar en la Asamblea, y para ello tiene previsto enviar a Ginebra una delegación encabezada por el ministro de Salud y Bienestar, Chen Shih-chung.
A través de su participación en la Organización Mundial de la Salud, Taiwán desea compartir su exitosa experiencia en materia de salud con otros países desempeñando un papel constructivo en la protección de la salud mundial, convertirse en parte de los esfuerzos globales para lograr que exista una red internacional sin fisuras para la prevención de enfermedades y crear un escenario beneficioso para todos, para Taiwán, para la OMS y para la comunidad internacional.