La cuestión del precio es fundamental. “La oferta actual valora a Sabadell en 1,12 veces su patrimonio neto. Santander cotiza en torno a 1,20 y BBVA a 1,57. En operaciones recientes, como la venta de TSB en Reino Unido, se pagó 1,5 veces en un mercado donde la media era 1,2. Por eso quizás 1,20 habría sido una referencia más atractiva para el accionista de Sabadell”, explica Bellobí.
Según Bloomberg, la banca europea cotiza de media a 1,15 veces valor en libros, lo que sitúa la propuesta de BBVA ligeramente en la parte baja de la horquilla. “Sin embargo, Sabadell ha estado cotizando mucho tiempo por debajo del euro, comparado con los 3,30 euros de su cotización actual”, apunta el Bellobí.
Bajo el punto de vista de Bellobí, “La cotización del Sabadell recoge tres efectos. Por un lado, la buena evolución de su negocio en los últimos años. Segundo, una expectativa de dividendo tras la venta de TSB. Tercero, el propio impulso a la cotización de esta OPA”. “El tiempo ha transcurrido en favor de Sabadell”.
Más allá de las cifras, el socio de RSM destaca el encaje estratégico: “Sabadell es hoy la única opción para aumentar rápidamente su cartera crediticia en España. Con la compra de Sabadell, BBVA aumentaría en un 65% sus activos crediticios en España (y en un 31% sus activos totales), reequilibrando su balance frente a la contribución en el consolidado de México o Turquía”. El Banco de España recuerda que la concentración bancaria ha reducido en dos décadas de 55 a apenas una decena las entidades significativas, un contexto que hace inevitables movimientos de consolidación.
No obstante, Bellobí advierte sobre la coyuntura: “Estamos en un momento de efervescencia. Si llega una recesión, el negocio bancario lo nota con especial intensidad. Actualmente, las acciones de Sabadell y BBVA pasan por un muy buen momento bursátil, y eso puede enturbiar la lectura fría de su valor intrínseco.”.
La acción de Sabadell ha subido más de un 80% desde que se anunció la OPA en y un 200% desde 2021, lo que supone plusvalías muy relevantes para quien deba tributar. “El tema de la neutralidad fiscal (de sobrepasar el 51%) no es decisivo, pero es importante. En este sentido, la segunda oferta elimina el pago de un importe líquido”.
En cuanto al impacto social, el experto señala que la normativa obliga a mantener durante tres años las condiciones actuales de Sabadell, aunque a medio plazo será inevitable una racionalización de costes. “La integración aportará valor si se hace con cabeza y se protege el talento. El cliente busca solvencia y servicio, más que oficinas físicas”, afirma Jordi Bellobí.
¿Y qué pasa si la operación no se materializa? “Muy probablemente las cotizaciones de ambas entidades se resentirán. También la de BBVA”, explica Bellobí.
Sobre qué hacer, el experto concluye con una estrategia prudente: “Es difícil dar hoy un consejo, porque la oferta de BBVA no parece excesivamente generosa (si se considera el “goodwill” sobre patrimonio neto), pero tampoco despreciable (si se compara con la evolución histórica de su cotización antes del anuncio de la OPA). Supongo que muchos minoritarios esperarán hasta el final del plazo, para decidir sobre la OPA con la máxima información disponible”